Puede que sean cosas del mercado, de un mercado tan poco conocido y singular como es el del alquiler de balcones, pero a un mes de la inédita Semana Santa en el entorno de la Mezquita-Catedral los precios no solo no han subido respecto a años pasados sino que, incluso, y a pesar de la expectación que ha generado esta nueva carrera oficial en el entorno del primer templo cordobés, puede hasta hablarse de una oferta más que asequible.

Según ha conocido este periódico, ya se están comprometiendo balcones entre 750 (en Cardenal González para unas 5 personas) y 1.500 euros, en Magistral González Francés, en la carrera oficial. El segundo caso sería de tres amplios balcones, con sala auxiliar, acceso al baño y posibilidad de cátering para los 6 días (de Domingo de Ramos a Viernes Santo), que podrían disfrutar con comodidad unas 10 a 12 personas. Algo relativamente barato si se tiene en cuenta que esas mismas plazas en palcos en el Patio de los Naranjos ya supondría n700 euros. Además, está la comodidad (sala auxiliar con sofá y asientos, aseo, etcétera) y si se compara con otras ciudades... Por ejemplo, mybalcony.com (que, por cierto, este año aún no tiene ofertas de Córdoba), ya tiene en Sevilla un balcón por 8.000 euros. Eso sí: en la calle Sierpes, primera planta, para 12 personas, con cátering, sala de estar, baño, wifi y cocina, dice el anuncio. Pero sobre todo, porque ya en el 2013 en San Pablo, sin ser carrera oficial, los balcones se alquilaban entre 142 y 170 euros según el día elegido, mientras que en el 2015 se pedían 200 euros por el Viernes Santo en la zona de la Mezquita.

Claro que, por muy singular que sea la práctica de alquilar balcones, está tan sujeta al mercado como cualquier otro producto y previsiblemente a mediados de la Cuaresma los precios se incrementarán, igual que cuando se eche encima el Domingo de Ramos los propietarios se verán obligado a abaratar sus tarifas. Siempre que esa dictadura eterna de la oferta y la demanda no marque otra cosa, claro.