Historiadora del Arte y cofrade, Sarai Herrera ha sido designada por la Agrupación de Cofradías para comisariar la magna exposición Por tu cruz redimiste al mundo, que se celebrará en la Mezquita-Catedral del 15 al 22 de septiembre.

-¿Cómo afronta hacerse cargo de este importante proyecto?

--Con sumo respeto y cautela. Desde luego, yo solo soy una de las caras visibles de la exposición, pero es fruto del esfuerzo de un gran equipo de trabajo, tanto por parte de la Agrupación de Hermandades y Cofradías como del Cabildo Catedral de Córdoba, que se encuentra volcada en el proyecto. Sin las personas que forman parte de ambas instituciones no hubiera sido posible hacer realidad Por tu cruz redimiste al mundo.

-¿Cuáles son los objetivos de esta muestra?

--El objetivo esencial es que el visitante disfrute de la perfecta conjunción que supone el arte y la fe, unidos de manera indisoluble a lo largo de la historia. Contemplaremos un recorrido plástico por la Pasión de Córdoba y provincia, incluyendo sagradas imágenes que no sólo constituyen muestras destacadas del arte de todos los tiempos, desde el Gótico tardío hasta la imaginería actual, sino ante todos referentes devocionales. Es esta piedad popular y el simbolismo de la cruz el que marca la exposición. Además, contamos con un escenario privilegiado, en un edificio único e irrepetible como es el primer templo de nuestra diócesis. También se ha tenido en cuenta el ámbito didáctico, con el diseño de un libro-catálogo y de otros recursos que permitan al visitante adentrarse en esta experiencia de cultura y fe.

-¿Alguna imagen que le hubiera gustado y no está?

-En diversas ocasiones me han hecho esa pregunta. Sinceramente, hay que ser muy respetuosos con todas y cada una de las decisiones que han tomado las hermandades llamadas a participar. Personalmente, me quedo con la apuesta de cada una de las corporaciones que se han animado a sumarse a este proyecto histórico y sin precedentes. Debemos pensar que son muy generosas, ya que durante una semana se desprenden de sus imágenes devocionales para que todos disfrutemos de ellos en la Catedral.

-¿Destacaría alguna pieza en especial?

-Sería imposible quedarme con una sola de esas imágenes. Más allá de estilos y autores, cada una de ellas tiene algo que la convierte en única. Creo que por encima de centrarnos en una imagen, deberíamos profundizar en el conjunto, en su significado. El equipo de comunicación del Cabildo Catedral de Córdoba y yo hemos vivido momentos muy especiales a la hora de realizar los reportajes fotográficos a cada una de las efigies participantes. Me quedo con esos momentos.

-¿Esperaba la repercusión que ha adquirido la magna exposición?

-Ciertamente, lo esperaba, teniendo en cuenta otros precedentes como el Vía Crucis Magno o Regina Mater. De todos modos, creo que este acontecimiento va a superar los récords anteriores.

-¿Qué aporta una exposición de arte religioso en un momento social donde la Iglesia no está de moda?

-Más allá de modas, la religión católica, a lo largo de los siglos, siempre ha aportado lo mismo: cultura. Nuestra identidad y cultura se fundamenta y encuentra su esencia en los principios del humanismo cristiano. Solo hace falta ir a las fuentes y referentes para comprender esta circunstancia. Resulta innegable.

-¿Considera que las artes plásticas dedicadas a las cofradías están suficientemente valoradas?

-Afortunadamente, nuestras hermandades han tomado una mayor conciencia estética. Un gusto por los proyectos bien planteados y definidos, que formen parte de un programa previamente establecido, de manera coherente. Hay también un mayor gusto por artes que, tiempo atrás, eran consideras menores, como es el caso del bordado o la orfebrería. Creo que la aportación de personas formadas en la Historia del Arte o en las Bellas Artes es esencial.

-A pesar del interés que despiertan estas exposiciones ¿por qué cree que no ha cuajado en la ciudad el proyecto de museo cofrade?

-Ojalá este proyecto se reanude, pero con cimientos sólidos. Lo primero que hace falta es voluntad política para encontrar un espacio adecuado que acoja a este tipo de institución. Lo segundo es hacer un planteamiento coherente… ¿Qué es lo que realmente queremos una sala museística que simplemente conserve piezas artísticas o algo más conceptual? Yo siempre he considerado que lo correcto sería hacer un centro de interpretación de las cofradías, en el que pudiéramos narrar la Semana Santa como experiencia religiosa y estética, pero también en su aportación diaria e implicación con la ciudad. Debemos saber comunicar que aportamos a la sociedad.

-¿Cómo le gustaría que los cordobeses recordaran la exposición?

-Como un evento único y memorable de fe y cultura. Yo aún tengo recuerdos muy emotivos de la gran exposición que supuso La Pasión de la Virgen, celebrada en la Mezquita-Catedral en el año 1994.