El congreso nacional que cada año organiza la Fundación La Arruzafa (FLA) con profesionales del Hospital La Arruzafa (HLA) y que cuenta con la colaboración de Innova Ocular (IO), suma este año su decimoctava edición en una cita que focaliza su atención en el glaucoma, una patología que supone la pérdida del campo de visión y que se sitúa como la tercera causa de ceguera en los países desarrollados.

El simposio, que cuenta con cuatrocientos inscritos y que se va a desarrollar entre el viernes y el sábado en el Parador de Córdoba, incluye un total de 36 ponencias que se distribuyen en ocho mesas redondas donde participan especialistas de diversos puntos del país, entre los que cabe destacar a Susana Duch (Instituto Condal de Oftalmología de Barcelona), Francisco Javier Goñi (Centro Médico Teknon Mollet del Vallés de Barcelona), Francisco Muñoz Negrete (Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid), Gema Rebolleda (Hospital Ramón y Cajal de Madrid), José Luis Urcelay (Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid) o los propios especialistas del HLA, entre otros.

Según explica el coordinador de la Unidad de Glaucoma, Neuroftalmología y Uveítis del HLA que dirige el congreso, el oftalmólogo Antonio Hidalgo, el propósito que se persigue es “una vez más, reunir a los mayores especialistas que existen en España actualizar y poner en valor los últimos avances en técnicas de diagnóstico, tratamiento y cirugía de esta enfermedad”.

El glaucoma, según detalla Teresa Laborda, especialista de la misma unidad, es una “lesión del nervio del ojo (neuropatía) con pérdida de fibras nerviosas que provoca una pérdida del campo de visión”. En este sentido, añade que se trata de una patología “silenciosa”, en alusión a que ofrece síntomas hasta fases muy avanzadas.

Hidalgo especifica que “en los últimos años, la cirugía del glaucoma ha desarrollado cambios sustanciales con la generalización de técnicas menos agresivas que permiten un mayor control y eficacia de la enfermedad”. Un ejemplo de este tipo es la esclerectomía profunda no perforante (procedimiento filtrante que se emplea para conseguir un descenso de la presión intraocular) o la aparición de las llamadas técnicas MIGS, que aluden a “procedimientos quirúrgicos que incluyen el implante de dispositivos que consiguen un flujo controlado del humor acuoso de manera muy controlada con el propósito obtener un descenso en al presión intraocular”, asevera el especialista.