Ayer por la mañana, y tras varios años de intento, abría por fin sus puertas la antigua Escuela de Magisterio, conocida como la ‘Normal’ de Córdoba. A primera hora del lunes comenzaban a tomar posesión de sus puestos los trabajadores municipales que a partir de este momento prestarán aquí sus servicios.

Tras varias décadas de trabajos y la pelea de cuatro gobiernos municipales por rehabilitar este edificio, la ‘Normal’ recibió a sus primeros visitantes. De momento son pocos y pertenecen al área municipal de Transformación Digital, aunque de manera paulatina se irán incorporando más funcionarios.

El objetivo de este nuevo equipamiento, que se financió con los fondos europeos del programa Urban Sur, es, como ha explicado la delegada municipal de Transformación Digital, Lourdes Morales, «revitalizar la zona y beneficiar a los vecinos» de la ciudad abriéndoles las puertas de las nuevas tecnologías y contribuyendo a la eliminación de la llamada brecha digital.

En este sentido la delegada subrayó que «desde el Ayuntamiento lo que hemos intentado es subirnos a ese carro de la digitalización» y acercar ese mundo a los vecinos porque «necesitamos un cambio de cultura». «De nada sirve --señaló-- que se pongan todos los trámites por Internet si no capacitamos a los ciudadanos».

Por ello el Ayuntamiento va a poner en marcha una campaña de capacitación digital en la que la antigua Escuela de Magisterio tendrá un lugar destacado.

Además de acoger a los trabajadores del área, la normativa europea marca unos usos específicos. Así, se dedicarán buena parte de los más de 6000 metros cuadrados del edificio a actividades culturales y de participación ciudadana, con salas de lectura, audiovisuales o informática, que comenzarán a estar poco a poco operativas después del verano, siempre y cuando --aclara-- la situación sanitaria lo permita.

Por otro lado, una parte de esos usos estarán relacionados con cuestiones como laboratorios multimedia, centro TIC o emprendimiento.