A la modificación de la Ley de Propiedad Horizontal se une la nueva normativa de fomento de alquiler, que entró en vigor en junio pasado, y la directiva de la Unión Europea sobre eficiencia energética para edificios, dirigida a garantizar el cumplimiento de medidas para la contención de emisiones de gases de efecto invernadero, del consumo energético y de generación de energía a partir de fuentes renovables.

Una de las más importantes novedades que contiene la Ley de Propiedad Horizontal es la fortalecer en todo lo posible la vinculación de los deberes impuestos a los titulares, tanto en lo que concierne al disfrute de la propiedad, cuanto en lo que se refiere al abono de gastos, y se recoge que "el incumplimiento de las obligaciones genera la acción dirigida a exigir judicialmente su cumplimiento".