El alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, ha presentado este martes a ciudadanos y colectivos las líneas básicas de desarrollo del Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Córdoba (PMUS), que constituye una guía de recomendaciones y un documento marco de referencia para "conseguir una ciudad con el mejor servicio de transporte municipal y hacer que el tráfico sea más fluido, favoreciendo así una movilidad más eficaz".

Nieto ha explicado que el PMUS, como elemento de planificación y gestión de la ciudad, tiene como objetivo primordial "la implantación de formas de desplazamiento más sostenibles dentro del territorio, que favorezcan la protección del medio ambiente, la cohesión social y el desarrollo sostenible para garantizar una mejora en la calidad de vida de los ciudadanos".

El plan asume las sugerencias y aportaciones de la participación ciudadana --que durante estos años se han propiciado en varias mesas técnicas participativas, celebradas durante los periodos de las 'Semanas de la Movilidad' de 2012 y 2013--, para su programación e implementación técnica, porque "se pretende que sea un plan de todos".

Con un horizonte de actuación hasta el año 2030, la problemática que plantea solucionar es compleja y transversal, teniendo en cuenta que los retos a los que la ciudad se enfrenta obligan a repensar algunas estrategias. Por ello, Nieto ha subrayado que "se necesita una constante retroalimentación y actualización, para que el Plan de Movilidad sea una herramienta que favorezca la cohesión social, la habitabilidad del espacio público, el progreso y el empleo".

Desde el punto de vista del contenido, se trata de una memoria síntesis en la que se definen los nuevos objetivos globales, se reordenan las medidas planteadas para fomentar una nueva distribución modal, se generan nuevas propuestas dentro del Plan de Acción, así como un programa de actuación a corto plazo y se realiza una síntesis de la participación ciudadana.

Todo ello en relación a la Estrategia de Europa de 2020 y la Ley de Economía Sostenible, subrayándose la importancia de los objetivos energéticos y ambientales. En este sentido, el objetivo es la reducción de un 20%, antes de 2020, de las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a los niveles de 1990, aumentar al 20% la cuota de combustibles limpios en el transporte y aumentar un 20% la eficiencia energética.

Se trata de un modelo integral de movilidad eficaz para todos, peatones, ciclistas y el transporte público, especialmente centrado en el casco histórico de la ciudad, y se presenta a colectivos y ciudadanos, en general, para enriquecer el plan, porque se pretende que sea un plan de todos.