La empresa adjudicataria de la reforma del Templo Romano, Arquepec, un proyecto incluido en el Plan Turístico de Grandes Ciudades, ha paralizado la obra de manera unilateral y ha solicitado por carta a la delegación de Turismo un modificado del proyecto. Fuentes municipales confirmaron esta paralización, que se produjo el lunes, cuando los trabajadores ya no acudieron a la obra. Esas mismas fuentes informaron de que confían en que pueda solucionarse este problema, que ocasionará un nuevo retraso a este proyecto que ya acumulaba meses de tardanza respecto a las fechas que se barajaron inicialmente. Estas obras, que se iniciaron en julio, tenían un plazo de cinco meses y un presupuesto cercano a los 400.000 euros, rebajado en la adjudicación. Cuando el Templo Romano esté por fin abierto, la visita se podría hacer a tres niveles, el de la cimentación, el de la plaza y el del pronaos (pórtico), para lo que se debía construir una pasarela. Además, la adjudicataria estaba conectando el yacimiento con la planta baja de Capitulares, una operación que provocó las quejas de los trabajadores por el ruido y las vibraciones que ocasionaba.

OTRAS OBRAS PENDIENTES

Esta no es la única obra del Plan Turístico con problemas. El pasado mes de mayo la empresa Construcciones y Desarrollos Tudmir SL, adjudicataria de la reforma del Convento Regina, planteó los primeros problemas al Ayuntamiento para no iniciar la obra de limpieza, consolidación y puesta en valor de la antigua iglesia del convento,. Esta reforma se adjudicó el 16 de marzo por un precio de 562.468 euros y estaba previsto que durara 6 meses. Actualmente, la obra sigue sin empezar porque la adjudicataria ha renunciado y el Consejo Consultivo debe pronunciarse antes de elegir a otra.

El Plan Turístico de Grandes Ciudades se puso en marcha en virtud de un convenio firmado en junio del 2014 entre la Junta y el Ayuntamiento para desarrollar en dos años una treintena de actuaciones por 5 millones. Precisamente, los dos concursos reseñados, los de la obra de Regina y del Templo Romano, fueron aprobados a la vez, en septiembre del 2017, por la junta de gobierno local. El tercer proyecto pendiente del plan turístico es el de la Torre de la Inquisición, que debe salir a concurso. La vigencia del plan expira en la primera mitad del 2019.