Los taxistas cordobeses están sufriendo en julio un descenso del 66% en la demanda respecto al mismo mes del año pasado, según estimó ayer el presidente de la Asociación del Taxi de Córdoba (Auttacor), Miguel Ruano. De este modo, señaló que, según un estudio realizado por la Junta de Andalucía, en los peores momentos del estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo para frenar la pandemia de coronavirus, «hasta gran parte de mayo», estimó, la caída de la actividad fue del 86%, pero ahora «se va recuperando poco a poco».

Esta situación ha obligado a reducir la presencia de taxis en la calle y desde el citado decreto solo sale a trabajar cada día el 50% de la flota. La cifra se mantiene por el momento, aunque Ruano avanzó que barajan la posibilidad de plantear al Ayuntamiento de Córdoba que en septiembre suba al 67%, mientras que lo habitual sería que estuviese funcionando el 84%.

El presidente de Auttacor lamentó que «sigue existiendo mucho temor» al covid-19, aunque esta situación también ha motivado que las vacaciones sean diferentes «y parece que no saldrá tanta gente de Córdoba». El colectivo confía en que el escenario mejore tras el verano, cuando, entre otras actividades, se reabrirán los colegios.

«Situación desastrosa»

En otro orden de cosas, el presidente de Auttacor aseguró que esta entidad, que representa a la mayoría de los taxis en Córdoba, está «muy molesta» con el estado del área municipal de Movilidad y destacó que «la situación admnistrativa de los taxis es desastrosa». Ruano explicó que «los 509 taxis de Córdoba están sin documentación administrativa en un porcentaje muy alto porque no hay funcionario que se dedique a esta labor». En cuanto a los muchos asuntos que, según Auttacor, se encuentran sin resolver, entre estos figuran la convocatoria del examen de carné municipal aplazada en marzo; la tramitación de cuestiones como las excedencias, los cambios de vehículo, las certificaciones de días de descanso y la renovación de carnés caducados, lo relativo a ayudas y las revisiones municipales.

Uber, casi desaparecido

De otro lado, distintas fuentes consultadas indicaron ayer que la actividad de la multinacional Uber se ha reducido a mínimos en la ciudad y así lo confirmó Rafael Herrera, gerente de Weupp Transfer Córdoba, una empresa que tiene tres licencias de VTC y trabaja con esa firma. Este profesional confirmó que durante el estado de alarma han realizado «servicios mínimos» con Uber con un conductor, ha colaborado otro y a partir de hoy lunes volverán a ser tres.

Acerca de Ares Capital, manifestó que esta empresa tiene unas 2.000 licencias de VTC a nivel nacional, ha aplicado un expediente de regulación temporal de empleo a sus trabajadores «y ellos no han vuelto». De este modo, sobre su presencia en Córdoba concretó que «había trabajando una treintena de coches y algunos tenían dos conductores», por lo que «puede haber medio centenar de conductores afectados por el ERTE».

Este periódico intentó contactar con Uber y con uno de sus conductores, pero no le fue posible. Al tratar de reservar un vehículo para realizar un recorrido, la App informaba de que no había coches disponibles.

Ruano subrayó que «Uber se fue cuando se declaró el estado de alarma. No le importa ni Córdoba ni los cordobeses, no está aquí porque no hay turismo».