Medio centenar de personas integradas en el colectivo Acampada Dignidad se concentró ayer en las inmediaciones de la Subdelegación del Gobierno de Córdoba para servir la comida del día en el mismo, momento en el que el alcalde, José Antonio Nieto, y el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, se reunían para trazar el plan de seguridad sobre mendicidad infantil en la ciudad. El motivo de la protesta fue, según el coportavoz de este colectivo, Rafael Juan, "el acoso al que el alcalde tiene sometido al centro social Rey Heredia con los cortes de suministro de agua y luz, que llegan hasta el ridículo de tapiar con cemento bocas de riego cercanas o, en el caso de la luz, llamar repetida e insistentemente a la compañía suministradora para que procedan al corte definitivo, cuando la compañía no tiene ningún interés en hacerlo". Juan añade que Acampada Dignidad ha hecho todo lo posible desde el primer día por pagar ambos suministros.

Por otra parte, el consejo de distrito Sur ha enviado al gobierno municipal el plan de usos que quiere darle al centro Rey Heredia, proyecto que plantea crear una Casa Ciudadana para todos los barrios de la orilla izquierda del Guadalquivir.