España y Portugal reabrieron sus fronteras ayer miércoles, 1 de julio, en un acto al más alto nivel, hasta el punto de que contó con presencia de sus jefes de Estado y presidentes de Gobierno. Puede que para muchos cordobeses la noticia fuese una más entre todas las de la jornada, que la escuchasen de fondo en el telediario o algo de pasada en la radio, pero no para todos.

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Los ciudadanos portugueses que viven en Córdoba son pocos, no hay una comunidad lusa, una asociación o un lugar de encuentro donde añorar su tierra, pero los hay, y algunos han formado su familia aquí.

Por eso, tras tres meses y medio con la frontera luso-española cerrada debido a la pandemia de coronavirus, su apertura no pasó desapercibida para Patricia Ferreira, una joven odontóloga lisboeta afincada en Córdoba desde hace diez años.

Patricia ha pasado todos estos meses pendiente de su madre, que tiene 81 años y vive en Lisboa. Tiene un hermano, pero también a él le sorprendió el confinamiento en el extranjero. «Gracias al whatsapp hemos estado en contacto. A pesar de su edad, mi madre lo maneja bien y así ha podido ver las fotos y los vídeos que le enviábamos. Es lo que le ha dado la vida».

Patricia Ferreira y sus dos hijos en el coche, de viaje. Foto: CÓRDOBA

Porque Patricia y su pareja, un cordobés por el que decidió dejar su tierra natal -«él tiene una empresa y a mí, que soy autónoma, me era más fácil desplazarme»- tienen dos hijos, una niña de cinco años y un pequeño de tres. Juntos suelen ir siempre que hay un puente o varios días de vacaciones, como en Semana Santa o en la feria, a ver a la abuela a Lisboa. Pero este año no ha podido ser. «Hemos estado muy pendientes de ella. Hasta le hacíamos la compra on line en el supermercado para que no tuviese que salir».

Por eso, para Patricia Ferreira, con el corazón entre Córdoba y Lisboa, la reapertura de las fronteras con Portugal no fue ayer una noticia más en el telediario. «Ahora queremos ir a por mi madre para traerla con nosotros en cuanto podamos. Pero en Lisboa hay mucha incertidumbre por los rebrotes y estamos estudiando cómo lo haremos». Por lo pronto, la frontera vuelve a estar abierta.