La 17ª edición del Mercado Medieval de Córdoba ha abierto en el entorno de La Calahorra y hasta el parque de Miraflores con 150 puestos y la novedad de un campamento árabe, con teterías, talleres y atracciones para los más pequeños, todo ello tras la inauguración que ha encabezado este mediodía la concejala de Promoción de la Ciudad, Carmen González. Según González, se trata de “una cita que cada vez tiene más impacto y es más atractiva para la provincia” y que genera “un volumen de negocio en toda la zona, en los comercios y establecimientos de la Ribera y Campo de la Verdad”.

El Mercado Medieval de este año, organizado por la empresa especializada Rivendel, es un tributo a las culturas judía, árabe y cristiana, y con horario desde las 11 de la mañana a las 12 de la noche, se clausurará la noche del domingo, contará con tres carpas para exposiciones, juegos infantiles, escuela de arquería y un escenario para los espectáculos fijos nocturnos y conciertos. Además, según la organización, que ha pagado a la ciudad un canon de 50.000 euros, se potencia la zona de restauración y de tabernas, dándole más protagonismo al ubicarse en las arterias principales del Mercado: entre José Luis Villegas, Acera Mira al Río y un tramo de Fray Albino.

La coincejala ha reiterado que se extremarán los controles para que se cumpla la legislación sobre consumo y conservación de los productos que se ofrecen en el Mercado Medieval, cuestión que ha sido fuertemente criticada por Facua en pasadas ediciones y que ya ha sido objeto de polémica incluso antes del inicio del Mercado Medieval de Córdoba 2018. La instalación de este festival temático ha obligado a un plan especial de tráfico en la zona y a adoptar distintas medidas de seguridad en los accesos.