Con motivo de la presentación de la campaña del Infoca, los responsables del plan hicieron balance de algunos de los datos fundamentales de la campaña anterior. Así, Eduardo Nicolás, responsable del operativo en Córdoba, indicó que esta provincia fue de las que menos sufrió el año pasado el daño de las llamas, con apenas 100 hectáreas quemadas. Sin embargo, puso de manifiesto que de todos los incendios declarados el año pasado el 34,8% fueron intencionados y el 32,29% se produjeron por alguna negligencia o falta de medidas de seguridad en alguna labor agraria o de otro tipo acometida en zona forestal o cerca de ella. Los incendios accidentales representaron el 14,58% del total, mientras que el 15,8% se produjeron por motivos desconocidos y el 3,13% tuvieron su origen en causas naturales. Por su parte, Antonio Repullo explicó las medidas que se han venido tomando de manera preventiva para evitar los incendios en terrenos forestales de la provincia. De modo que en lo que se refiere a selvicultura preventiva en montes públicos se ha llevado a cabo la apertura de cortafuegos mecanizados en 878,94 kilómetros lineales, a ellos se unen los 482,75 kilómetros de cortafuegos manuales. Destacó asimismo la colaboración que se recibe de los ganaderos, que introducen sus ganados en zonas en riesgo, de modo que este año se han limpiado por este método 51,31 kilómetros lineales, trabajo que se ha realizado con 8.934 cabezas de ganado. Junto a ello se han llevado a cabo labores de cuidado y mantenimiento selvícola en otros 248,13 kilómetros lineales. Todo ese trabajo ha supuesto una inversión, según explicó Antonio Repullo, de 483.940 euros. En terrenos privados hay en vigor 2.215 planes de prevención, que afectan a 326.510 hectáreas. R.V.
