La presidenta del Instituto de Desarrollo Económico de Córdoba, Blanca Torrent, ha presentado esta mañana junto al presidente de Hostecor, Francisco de la Torre, y el presidente del Consejo Regulador Montilla-Moriles, Javier Martín, una iniciativa formativa financiada por el Ayuntamiento de Córdoba que permitirá a 500 profesionales de la hostelería hacer un curso presencial sobre el uso de los vinos y vinagres de la tierra en restaurantes y bares.

El objetivo es mejorar la formación del personal que trabaja en el sector y promocionar el consumo de este caldo, cuyas ventas han caído en torno a un 80% a raíz de la crisis sanitaria del covid-19, entre los turistas y locales que acuden a los establecimientos cordobeses, ofreciendo un sello de distinción. Según Javier Martín, aunque la gran mayoría de bares y restaurantes de Córdoba tienen algún vino de Montilla-Moriles, son pocos aún los que tienen un conocimiento en profundidad del producto y pueden ofrecerlo a sus clientes distinguiendo entre un amontillado, un oloroso, un palo cortado o un Pedro Ximénez o asesorarles sobre posibles maridajes con la gastronomía local. "Queremos acabar con el tetrabrick de Montilla-Moriles encima de la cafetera que se ve en muchos bares y del que te sirven una copa cuando pides un fino", ha destacado.

De la Torre ha reconocido que entre el personal hostelero de la provincia hay un déficit formativo en este sentido que el curso pretende paliar, ofreciendo de forma gratuita las claves del producto. Blanca Torrent, por su parte, explicó que el curso se impartirá entre finales de agosto y diciembre, con un programa mixto de teoría y práctica que correrá a cargo de la empresa Incentifor. Las inscripciones se pueden realizar en la web del Imdeec y en la de Incentifor las clases se impartirán en los viveros de Bao Bab.