En una encuesta realizada a 245 turistas que visitaron Córdoba en abril del 2015 sobre cuál fue la motivación para hacer turismo gastronómico en la provincia de Córdoba, el 44,6% respondió que deseaba ver almazaras, bodegas o fábricas de productos alimenticios, donde le explicasen el proceso productivo y técnicas de fabricación; el segundo motivo, con un 38,9%, es la degustación de los platos típicos del lugar (salmorejo, rabo de toro, flamenquín, etc) y el tercero, la compra de productos con DOP, que supone el 12,3%.

Respecto a la opinión que le producen los platos y productos degustados de la gastronomía cordobesa, estos obtienen una calificación muy alta, pues el 62,3% de los encuestados afirman que son de muy buena calidad. Además, el 34,7% de los turistas gastronómicos han realizado alguna ruta gastronómica frente al 65,3% que no. Según el estudio, las rutas gastronómicas principales de Córdoba conllevan la visita a pueblos del interior de la provincia, por lo que habría que potenciarlas, siendo las más visitadas las del vino, con un 74,2%, seguidas de las del aceite, con un 14,3%, y el jamón (8,4%).

Sin embargo, en una encuesta realizada a los restaurantes cordobeses, solo un 31,43% de los encuestados reconoce poner el nombre de la DOP o de los productos en los platos de su carta. Y casi un 50% de los hosteleros no llega a recomendar las rutas gastronómicas de la provincia aunque las ven de forma muy favorable para su propio establecimiento.