El tabaco de contrabando tiene «asfixiados» a los estanqueros cordobeses, que sufren una notable pérdida de ventas por la competencia del producto ilegal. De hecho, según el presidente de la Unión Provincial de Estanqueros, Manuel Fernández, «entre el 35 y el 40% del tabaco que se consume en Córdoba es de contrabando», como reflejan estudios de las multinacionales del sector. De este porcentaje, un 25% sería tabaco de picadura y el resto, cajetillas de cigarrillos. Por eso, Fernández no dudó ayer en felicitar a la Policía Nacional y a la Agencia Tributaria por la operación Rama, que según se dio a conocer este miércoles se ha saldado con la intervención de 69 toneladas de picadura de tabaco, el desmantelamiento de cinco naves de almacenaje y elaboración en Córdoba, Antequera, Málaga y Madrid, y la detención de 13 personas, dándose por desarticulada una organización con «origen» en Córdoba. Aunque, eso sí, el presidente de los estanqueros también lanzó una crítica para la Justicia después de que algunos de los detenidos en la segunda fase de la operación llevada a cabo en octubre ya hubieran sido arrestados en la primera, efectuada en junio. «Son los mismos que la vez anterior y debía haber algún resorte para frenar esto. Al final, la Justicia llega hasta donde llega y ellos siguen en la calle y vuelven a hacer lo mismo. A lo mejor habría que ver quién está detrás y les aporta el capital necesario. A lo mejor sería bueno eliminar la ley de contrabando y luchar con una sanción por parte de Hacienda por defraudación, de manera que si no cumplen vayan a la cárcel», reflexionó.

Mientras tanto, las ventas de los estanqueros cordobeses siguen bajando. Comparando los datos a septiembre del 2015 con los del mismo mes de este año, las de picadura de liar han descendido un 6,5% y las de cajetillas de cigarrillos, un 0,20%. Esta última cifra, que pudiera ser menor, sin embargo es mucho más significativa al comprobar que en el conjunto de Andalucía ha crecido un 2,34%. Esto quiere decir, según Fernández, que en Córdoba sigue habiendo mucha oferta de tabaco de contrabando en la calle, a diferencia de otras provincias. En este sentido, apuntó que en los pueblos cordobeses «hay mucho tabaco en las casas, con puntos de venta tremendos en casas particulares» y, ante esta realidad, «echamos de menos que actúe la Guardia Civil». «En la provincia -añadió- es donde más tabaco de liar hay. Gente como la que han detenido lo mandan a los pueblos y allí los empaquetan en bolsitas más chicas y lo venden al menudeo».

Así las cosas, el presidente de los estanqueros insistió en que «estamos asfixiados», sobre todo en barrios como Sector Sur, Fátima u otros de la periferia en los que «entre el 60 y el 70% de tabaco es de contrabando», mucho de este, afirma, de marcas que vienen de Luxemburgo.