La Policía Nacional ha desarticulado una organización delictiva dedicada al tráfico de inmigrantes en patera que, tras llegar a las costas españolas, eran trasladados a otros lugares y ha detenido a tres de sus integrantes en Motril (Granada), entre ellos el principal investigado de la trama. Según informan fuentes de la Policía Nacional, la red contaba con una fuerte infraestructura en Marruecos y España, donde cada miembro desempeñaba funciones específicas, estando implicados en el tráfico de más de setenta personas que habrían llegado a las costas españolas en patera para su posterior traslado a otro punto, informa Efe.

Además, les consta que al menos quince de los inmigrantes estuvieron retenidos en contra de su voluntad en dos pisos de Motril por espacio de dos meses a la espera de que sus familiares pagaran unos 50.000 dírhams (unos 4.600 euros).

Las investigaciones se iniciaron en enero, cuando agentes de la Ucrif de la comisaría provincial de Almería tuvieron conocimiento que un ciudadano marroquí había sido captado por un grupo de personas en su país natal ofreciéndole la posibilidad de venir a España en patera y que una vez ahí le darían trabajo y alojamiento. Estas pesquisas confirmaron la existencia de esta organización en Granada con ramificaciones en Almería, que se dedicaba al tráfico de inmigrantes en pateras hasta el sur de España.

TRASLADO A TORRENUEVA / Una vez allí y tras ser acogidos en centros asistenciales de Almería y Motril, eran contactados por miembros de la organización, concretamente por el máximo responsable de la red en España, que, con la ayuda de un hermano suyo y otro compatriota, les facilitaban el traslado hasta una vivienda en Torrenueva. Una vez que las víctimas llegaban, los miembros de la red los retenían contra su voluntad hacinados en el piso hasta que los familiares pagaran por cada uno de ellos la cantidad de 50.000 dírhams marroquíes para que pudieran ser puestos en libertad.

Además, se tuvo conocimiento de que el máximo responsable de la organización en España iba a abandonar el territorio nacional para ir a su país, donde iba a permanecer varios meses.

Se estableció un operativo policial en el que participaron más de una veintena de agentes de las unidades contra redes de inmigración y fronteras de Almería y Granada, en colaboración con agentes de la policía judicial de Motril, con el que se consiguió la detención de los tres miembros de la organización en España y la intervención de 8.749 euros, así como numerosa documentación que los implicaba en el tráfico de más de 70 personas. Los tres arrestados son de nacionalidad marroquí y el juzgado de instrucción en funciones de guardia en Motril ha decretado el ingreso en prisión para el cabecilla de la red.

NUEVO CENTRO DE ATENCIÓN / Por otro lado, el delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, anunció ayer que el nuevo Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE), en cuya habilitación la Unidad Militar de Emergencias (UME) está trabajando en el puerto de Motril (Granada), y que se pondrá en marcha el domingo, sustituirá al que ha funcionado hasta la fecha en la misma dársena granadina.

Celis lo ha señalado así en Sevilla en la presentación de la denominada operación Motril 18, que va a disponer de 80 militares y 24 vehículos para que, «en poco más de 72 horas, tengamos allí a disposición toda una serie de servicios» para dar acogida a unas 250 personas. De este modo se puede «desalojar el polideportivo» que se ha venido utilizando hasta la fecha cuando se llenaba el actual CATE, y que el Ayuntamiento de Motril, cuya colaboración ha agradecido Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ha pedido que se libere de cara al inicio de la temporada deportiva. El otro CATE de capacidad en la costa está en San Roque.