El hombre nacido en Siria y danés de nacionalidad que fue detenido en Málaga por integración en el Dáesh pretendía adquirir armas y chalecos antibalas en España y había llegado al país para evadir una condena de prisión en Dinamarca con ingreso previsto el pasado 15 de junio, informó ayer el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido.

Después de la cumbre del G4 de Interior, celebrada en Sevilla, Zoido explicó que este presunto terrorista, que ya ha sido enviado a prisión sin fianza, tenía una «férrea» adhesión al Dáesh y había sido combatiente en Siria. El presunto terrorista había retornado a Europa y se mostraba como un «gran experto» en armas y en la fabricación de explosivos.

Zoido subrayó que el arrestado estaba «mucho más radicalizado» y que lo mostraba de manera «explícita» a través de las redes sociales, utilizando simbología del Dáesh.