El Defensor del Pueblo Andaluz ha abierto una queja de oficio dirigida a las ocho diputaciones provinciales ante su preocupación por la situación de exclusión financiera que sufre la población que reside en municipios rurales y dispersos por el cierre de oficinas bancarias.

En la queja, publicada en la web oficial del Defensor, se recuerda que es una situación que afecta, sobre todo, a las personas más mayores o con dificultad en el acceso y manejo de las herramientas digitales.

Así, alerta sobre «el importante porcentaje de población que reside en localidades pequeñas y que se ve especialmente perjudicada por el cierre de sucursales, ya que, por su edad o por otras razones, carece de una mínima cultura digital y el acceso a los medios electrónicos les resulta complicado y, a veces, imposible. Es en referencia a estas personas que se ha acuñado el término exclusión financiera».

La institución ha solicitado a las diputaciones «que adopten medidas que puedan ayudar a resolver la situación expuesta en esos municipios», ya que a ellas les corresponde la asistencia a los municipios de menor capacidad.