Las izquierdas están decididas a aprovechar al máximo las concesiones que las derechas hagan ante los postulados de Vox, socio imprescindible del PP y Ciudadanos para la gobernabilidad de Andalucía. El órdago del partido ultra con la violencia de género y la primera cesión de los populares en esta materia suscitó fuertes críticas por parte del Gobierno y el PSOE, que ya preparan algunos movimientos para retratar a las fuerzas conservadoras en el Congreso.

La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo, reclamó que no se «enmascare» la violencia «específica» contra las mujeres, que «se llama machismo». Lo hizo a través de un mensaje publicado en Twitter, después de que el PP haya ofrecido a Vox dar cobertura a los hombres víctimas de lo que los ultras definen como «violencia doméstica».

El PSOE atacó también con dureza la propuesta de Vox de derogar la ley contra la violencia de género. En un momento en el que la derecha está en auge, como prueba el resultado en Andalucía, los socialistas quieren aprovechar el probable pacto del PP y Cs con la formación de ultraderecha en esa autonomía para volver a lograr la hegemonía dentro del voto femenino. Su secretario general en el grupo parlamentario, Rafael Simancas, anunció que el PSOE busca apoyos en el Congreso para convocar la comisión de seguimiento del pacto contra la violencia de género y retratar allí a Pablo Casado y Albert Rivera, informa Juan Ruiz Sierra.

«Nos preocupa que 43 años después de haber muerto el dictador haya partidos en la derecha dispuestos a blanquear un partido de ultraderecha. Y muy especialmente en relación a la mujer -afirmó Simancas-. Queremos preguntar a PP y Cs dónde están. Si están del lado de la protección a las mujeres o del lado del partido machista Vox. Si están con el 8 de marzo o con el partido neofranquista. Queremos preguntar si están dispuestos a desproteger a las mujeres a cambio de poltronas en el Gobierno andaluz. El señor Casado ya habla de violencia doméstica. Eso es alimentar el discurso de la extrema derecha machista. Es desproteger a las mujeres frente a sus maltratadores y asesinos».

Por su parte, la secretaria de acción institucional de Podemos, Gloria Elizo, reclamó a PP y Cs que «no se dejen atrapar por la visión machista de Vox» para alcanzar un pacto en Andalucía. Además, recriminó a la formación dirigida por Santiago Abascal que utilice «un problema tan grave» y que «mercantilice la libertad y la seguridad de las mujeres». Sobre la oferta del PP de ampliar las garantías a hombres que han sufrido violencia familiar, Elizo defendió que «no hay que confundir lo que es la protección de cualquier víctima con lo que es la perspectiva de género». En una entrevista en La Sexta, la dirigente morada recordó que violencia machista tiene una perspectiva de género y es «específica», mientras que el resto de víctimas de violencia, que «desde luego deben protegerse» a su juicio, están amparadas por un estatuto.