La ministra de Hacienda y exconsejera andaluza de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, quiso dejar claro ayer que las cuentas andaluzas siempre han sido «saneadas»y considera que PP-A y Ciudadanos (Cs), partidos que conforman el nuevo Gobierno andaluz, al poner en cuestión su ejecución durante la anterior etapa del Ejecutivo socialista, sólo buscan «excusas» para no cumplir con sus compromisos electorales o para no elaborar el presupuesto de la comunidad para este ejercicio. En declaraciones a los periodistas durante su asistencia en Sevilla con motivo del 28F, Montero insistió en que las cuentas andaluzas han sido siempre «saneadas», como lo dijeron tanto el que era ministro de Hacienda en el Gobierno del PP, Cristóbal Montoro, y organismos independientes como las agencias de rating.

Considera que PP-A y Ciudadanos buscan disculpas para trasladar que tienen dificultades para «desdecirse de muchas de las promesas que hicieron durante la campaña», como la de la creación de miles de empleos. «Cuando una formación política (en referencia al PP-A) promete tan alegremente que va a crear 600.000 empleos y el primer día que llega al Gobierno dice que es una frase electoral, lo dice todo: son partidos que tiene un cara ante los ciudadanos en momentos de campaña y que luego no son capaces de gobernar o por lo menos no bajo las premisas con las que se han presentado ante los electores», según recalcó. Montero defendió que Andalucía siempre ha sido equilibradora de las relaciones entre los territorios de España y ese papel tiene que seguir jugándolo. Preguntada sobre si cree que hay riesgo de involución autonómica, Montero señaló que es preocupante que Vox, una formación política que propugna «la involución del estado de las autonomías y la recentralización de las competencias», sea uno de los partidos que sustenta al nuevo Gobierno andaluz. «Hay un riesgo claro de que la aparición de la ultraderecha en los parlamentos autonómicos o nacionales provoque un debate de involución, teniendo en cuenta que PP y Ciudadanos blanquean esos mensajes y asumen parte de esas tesis», alertó Montero.

Respecto al hecho de que su futuro político se vuelva a vincular con Andalucía como posible cabeza de lista por Sevilla al Congreso de cara a las elecciones generales del 28 de abril, señaló que ella lleva esto «con mucha deportividad» y que en estos momentos está absolutamente concentrada en su tarea como ministra de Hacienda. «La responsabilidades políticas que he ocupado siempre las he considerado como donde me tenía que dejar la piel, porque era mi lugar. Esa es mi aspiración, ser una buena ministra de Hacienda, que es en lo que estoy y en ello voy a seguir hasta que los ciudadanos decidan cuál es el futuro Gobierno que se conforme», sentenció.

El portavoz del PP-A en el Parlamento, José Antonio Nieto, insistió ayer en que Montero será una de las personas que «tendrá que dar cuenta» de «algunos errores o falseamientos de los datos contables» que se están conociendo de la gestión de los anteriores gobiernos socialistas. Para Nieto, la todavía ministra «tiene un master en excusas para no cumplir nada de lo que dice, de eso sabe mucho» dijo textualmente.