La secretaria general del PSOE-A y presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, hizo ayer un llamamiento a patronal y sindicatos para «firmar cuanto antes, en los próximos días, un acuerdo para combatir juntos la precariedad laboral», cuestión que ha calificado como «la gran asignatura pendiente». Un desafío que lanzó en Torreperogil durante su intervención en la Fiesta de la Rosa del PSOE de Jaén, en la que también participaron los secretarios generales del partido en el municipio y la provincia jiennense, José Ruiz y Francisco Reyes, respectivamente, así como el del JJSS-Jaén, Juan Francisco Serrano. En el acto, celebrado en el recinto El Pinar de la Mejorana, Díaz insistió en «pedir» a los sindicatos y a la patronal la firma definitiva de un acuerdo a tres bandas «para combatir juntos la precariedad laboral». Si «se genera más riqueza, si las cosas van mejor, tiene que ir mejor para quienes más han sufrido en esta crisis, y quienes más han sufrido han sido los trabajadores y trabajadoras, la gente honesta, humilde, que lo ha dado todo para que este país saliera delante», recordó.

En esta línea, ha reiterado su «compromiso de no dejar a nadie en el camino», apostando por los jóvenes, tanto con medidas para el retorno de quienes están fuera como con la bonificación al 99% de las matrículas universitarias que ha propiciado que «los datos académicos son mejores».

Igualmente, ha reiterado su apoyo a los «mayores de 45 y 55 años», para los que la Junta, en colaboración con los ayuntamientos, impulsará «este mismo año» un plan de empleo para «quien merece una segunda oportunidad para volver al mercado laboral». Unas tareas todas estas en las que se ha mostrado convencida de que «el Gobierno Pedro Sánchez va a ayudar».

La dirigente socialista andaluza ha valorado positivamente los buenos datos en creación de empleo, exportaciones, turismo o inversión empresarial en la comunidad. En el transcurso del acto hito también una encendida defensa de la educación y la sanidad públicas y de calidad, así como del sistema de dependencia, punto en el que ha rechazado que se pretende hacer «una causa general» de problemas puntuales en cuya mejora se sigue trabajando. De este modo, ha subrayado que no van a «tolerar que nadie la denigre para que otros vengan a hacer negocio».