La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, dijo ayer que entiende que la continuidad de Susana Díaz al frente de los socialistas andaluces es un «debate jugoso», pero aseguró que «no hay debate» al respecto en la dirección federal y que será la militancia la que decida «en su momento».

«Es un debate jugoso, pero lo hemos dicho por activa, pasiva y perifrástica: no hay debate», insistía Lastra, que resaltaba que el PSOE está volcado en defender a la sociedad andaluza de posibles ataques del Gobierno y en tener un partido «cada vez más fuerte» para enfrentarse a las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo. La número dos del PSOE presidía por la mañana, en ausencia del secretario general, Pedro Sánchez, la reunión en la que la ejecutiva federal analizó con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el proyecto de Presupuestos que ha presentado el Gobierno. Preguntada por si la dirección federal tiene previsto impulsar una consulta entre los militantes de la federación andaluza para revocar a Díaz, como permiten sus estatutos, Lastra lo calificaba de «retorcido», al tiempo que hacía hincapié en que «la máxima autoridad de este partido es la militancia» desde el 39 Congreso, celebrado hace año y medio. «El 39 congreso definió muy bien el modelo de partido que tenemos y nos costó muchas lágrimas, pero ya no vale más el voto de Adriana Lastra que el de Pepito Pérez, militante de la agrupación de Linares, y las decisiones las tomará la militancia andaluza cuando así lo decida», recalcó. Lastra señaló que la dirección federal ha sido «muy clara» desde el resultado de las andaluzas del 2-D y advirtió de que cuando los socialistas «no gobiernan y no consiguen apoyos necesarios para gobernar» tienen que «hacer una reflexión sobre por qué es así».