La economía andaluza mantiene prácticamente igual su estructura productiva en las últimas décadas, sustentada en la construcción y en los servicios, y durante la crisis apenas la ha modificado, por lo que debe «maximizar los recursos de los que dispone». Estas conclusiones se recogen en el segundo informe sobre la competitividad de la economía andaluza, elaborado por la Universidad Loyola Andalucía para la Confederación de Empresarios de Andalucía. El presidente de la comisión de estrategia empresarial de la CEA y profesor de la Universidad Loyola Andalucía, Manuel Alejandro Cardenete, explicó que «la estructura productiva andaluza es la que es» y, en consecuencia, «no hay que pensar tanto en cambiarla sino en sacarle punta a la productividad». En este sentido, incidió en que hay que «maximizar» los recursos con los que cuenta la economía y potenciar la industria agroalimentaria y la extractiva, la cual ha resurgido en los últimos años, así como el sector aeronáutico. Según el informe, los sectores que más empleo crean por cada millón invertido son las actividades administrativas y servicios auxiliares, con 134,6, y las actividades de los hogares como empleadores de personal doméstico, con 126,6, entre otros.