El ínfimo tamaño, las escasas exportaciones y la falta de actividad innovadora siguen siendo algunas de las debilidades de las pymes andaluzas, según el resultado de la primera encuesta sobre la situación de estas empresas realizada por Garántia, la sociedad de garantía recíproca andaluza. Este trabajo, que basa sus conclusiones en una encuesta realizada a un millar de pymes, entre febrero y marzo pasados, cifra en 545.369 el número de estas empresas, de las que el 54,4% son autónomos, y otro 41,3% emplea a entre dos y nueve trabajadores, lo que determina que el 95,7% de las pymes andaluzas pueden catalogarse como microempresas.

Las pequeñas empresas, aquellas con una plantilla de entre 10 y 49 empleados sólo representan el 3,8% de las pymes andaluzas, mientras que únicamente el 0,5% restante se pueden catalogar como empresas de tamaño mediano, al contar con entre 50 a 199 empleados. El informe de Garántia sostiene que este tamaño de las pymes andaluzas «es muy similar a la del conjunto de pymes españolas, aunque el de la andaluza sería ligeramente inferior al de la media nacional».

El tamaño de las pymes andaluzas es también reducido si se analiza su facturación, pues el 62,9% de ellas factura menos de 300.000 euros; otro 17% pertenece al tramo de facturación de entre 300.000 euros y 600.000 euros, mientras que sólo el 8,2% factura más de 1,5 millones de euros.

La escasa actividad exportadora e innovadora es otra característica de la pyme andaluza, ya que sólo el 6,5% de estas empresas exportó algún bien o servicio en el 2018 y únicamente un 10% emprendió alguna actividad de innovación, según la encuesta. Los servicios aglutinan al 77,9% de las pymes andaluzas, casi todas ellas comercios, frente al sector de las telecomunicaciones y de la sociedad de la información, con sólo el 1,3%.