Cientos de usuarios del cámping Doñana, una de las instalaciones más afectadas por el incendio declarado hace tres semanas en la localidda de Moguer (Huelva), se concentraron ayer ante sus puertas para reclamar a las administraciones ayuda para hacer frente a los daños materiales. La concentración había sido convocada por los responsables y trabajadores del cámping bajo el lema ‘Cámping Doñana se levanta’.

La dirección del cámping, que calcula las pérdidas entre los seis y los diez millones de euros, está trabajando para volver a poner las instalaciones a punto y poderlas reabrir, algo que no se producirá antes de abril del próximo año.

Esto supone que este cámping, uno de los más populosos de la zona, y que ya el fin de semana del incendio lucía el cartel de «completo», haya perdido todo lo que resta de temporada.

Por otra parte, miembros del bufete de abogados Osuna han aprovechado esta convocatoria para reunirse en el lugar con aquellos afectados por el incendio que han decidido presentar una demanda judicial conjunta para lograr hacer frente a las pérdidas.

Fuentes del despacho de abogados han informado a Efe de que ya son más de una veintena los afectados que han decidido sumarse a esta demanda y que hoy mismo se nombrará a un procurador para personarse en la causa abierta por este siniestro en los juzgados de Moguer.

«Queremos que se nos informe de las diligencias abiertas y de la información que obra en la causa, procedente de la Guardia Civil, de la «dministración autonómica o de los Bomberos del Consorcio Provincial, para ver cómo proceder», han indicado.