El expresidente de la Junta de Andalucía Manuel Chaves aseguró ayer viernes que el juicio de la denominada pieza política del caso de los ERE, en el que fue condenado a nueve años de inhabilitación especial por un delito de prevaricación continuada, se vio «condicionado» por un «clima de presunción de culpabilidad» generado desde la instrucción de la causa.

Chaves se pronunció de este modo durante una entrevista en la cadena Ser, recogida por Europa Press, en su primera valoración pública tras la condena de la pieza política de los ERE, que calificó como «injusta» por lo que recurrirá ante el Tribunal Supremo con la confianza de que «se haga justicia». El expresidente andaluz reconoció una «responsabilidad política» en el caso ERE que «asumí en su momento» con la baja en el PSOE y la dimisión como diputado y admitió que «es posible» que se equivocase «en las personas y a la hora de vigilar», pero quiso dejar claro en ningún momento pudo «apreciar ilegalidad ni menoscabo de fondos públicos» porque no hubo aviso en este sentido de la Intervención General al Consejo de Gobierno. «La sentencia no es firme y yo la respeto, pero no la comparto, porque tengo la convicción de la legalidad de todas las decisiones adoptadas en el Consejo de Gobierno mientras fui presidente», señaló. Insistió en que el Consejo de Gobierno que él presidió «nunca fue advertido» de ilegalidad o de menoscabo de fondos públicos, al tiempo que señaló que es verdad que otras instancias de la administración sí recibieron algún informe en relación con esas transferencias de financiación. Quiso dejar claro que esos informes nunca llegaron al Consejo de Gobierno y que él, como presidente, no tenía la obligación de conocer cómo era el procedimiento de concesión de ayudas ni cuánto dinero recibían los trabajadores acogidos a las pólizas.