Una juez dejó ayer en libertad con cargos a los cuatro vecinos de Jaén que supuestamente se tomaron la justicia por su mano y se organizaron para dar una paliza a un inmigrante al que consideraban culpable de un robo que no cometió. La policía mantiene la investigación abierta y rastrea las redes sociales de los detenidos para identificar y detener al resto del grupo de unas 15 personas que acudieron a la llamada. Todos ellos se dirigieron hasta el edificio en construcción donde vivía la víctima junto con otros dos inmigrantes más para «dar un escarmiento» a quienes consideraban responsables del robo con violencia que en plena calle había sufrido un anciano, padre de uno de los tres detenidos.

Este hombre había denunciando haber sido víctima de un robo y una agresión por parte de dos jóvenes, al parecer magrebíes. El grupo de vecinos del barrio del Polígono del Valle era convocado por uno de los arrestados, presuntamente el cabecilla, para acudir en fecha y hora determinadas mediante un audio en la red social WhatsApp con el fin de «vengar» la afrenta de a uno de sus vecinos. «Con máscaras y pasamontañas para ocultar sus rostros y no ser identificados, vestidos de negro y armados con palos y armas blancas» y al grito de «fuera moros» propinaron una brutal paliza a uno de los jóvenes que solía pernoctar en el edificio en construcción. La Policía Nacional ha detenido ya al presunto autor del robo al anciano sin que tuviera éste nada que ver con los jóvenes magrebíes asaltados.