El presidente del PP-A, Javier Arenas, redundó ayer en su deseo de que las convocatorias de elecciones generales y autonómicas concurran por separado, algo que el dirigente popular ha apoyado continuamente desde su lugar en la oposición en Andalucía, llegando a proponer en el Parlamento una modificación de la Ley Electoral para que de forma obligatoria no puedan coincidir ambos comicios. No obstante, desde la cúpula nacional del partido parecen no estar de acuerdo con lo que pide el líder andaluz de los populares.

"Siempre he defendido y seguiré defendiendo las elecciones separadas en Andalucía" para "analizar a fondo nuestros problemas de forma separada", dijo ayer en un acto público celebrado en Vejer de la Frontera (Cádiz) contradiciendo de este modo a la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, que defendía el sábado que las elecciones en Andalucía también se adelanten y se convoquen el 20 de noviembre para coincidir con las generales.

Arenas señaló por otro lado que "lo ideal" hubiera sido que las elecciones generales se hubieran celebrado hace "mucho tiempo" para que pudieran plantearse las andaluzas en otoño "de forma separada", evitando "perder tanto tiempo en la lucha contra la crisis". Al mismo tiempo, argumentó que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, no ha convocado las elecciones el 20 de noviembre porque "tiene miedo al efecto Rubalcaba", que calificó de "ficción". Dijo que "si creyera en el efecto Rubalcaba, por razones partidistas, habría convocado las autonómicas el mismo día que las generales". En cualquier caso, el dirigente popular sentenció que Griñán "normalmente hace lo contrario de lo que dice", por lo que no descarta que, en contra de que ha afirmado de que los comicios van a celebrarse en marzo, finalmente "se celebren juntas en otoño".

Por último, insistió en que el PP no tiene "ninguna ansiedad por llegar", ya que el partido está "preparado para gobernar en Andalucía, ya sea en noviembre o en marzo", y expresó que "ojalá se celebre antes de marzo" para no perder tiempo en la lucha contra la crisis económica.

En contra de esto, la portavoz de los populares en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, apuntó el sábado que "los andaluces también se merecen formar parte del cambio que se va a producir en noviembre" e instó a los socialistas a explicar por qué priva a Andalucía de un adelanto electoral igual al que se ha llevado a cabo con las generales.

Ayer, Sáenz de Santamaría no se retractó de lo dicho pero tampoco ahondó más en la idea del anticipo de comicios en la comunidad andaluza, y dijo en declaraciones a Onda Cero que la elección "depende" del presidente de la Junta. No obstante, lamentó que resulte probable que el líder andaluz "siga igual que el PSOE a nivel nacional", con la diferencia de que Zapatero "no tuvo más remedio" que convocar elecciones "por el peso de la opinión pública".

Los socialistas criticaron la contradicción dentro del PP y ayer el vicecoordinador del Comité Electoral del PSOE, Antonio Hernando, recomendó a los dirigentes del Partido Popular que se pongan de acuerdo. "Es un espectáculo patético. Mientras la portavoz del Grupo Popular en el Congreso pide que las elecciones andaluzas se adelanten, Arenas dice todo lo contrario", aseguró el socialista. "En el PP, todos piensan en su propio interés cuando lo que deberían hacer es pensar en el interés de los andaluces", subrayó Hernando.

El responsable socialista recordó, además, que en el PP, "miran mucho los calendarios, pero no ponen encima de la mesa ni una sola propuesta para ayudar a su país a recuperarse de la crisis". "Tendremos que irnos acostumbrando a que la estrategia del Partido Popular, durante los próximos meses, sea la de hacer teatro o lanzar calumnias para disimular que no tienen proyecto", concluyó Hernando.

CCOO LO VE "ACERTADO" El secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, cree "acertada" la intención del presidente de la Junta de agotar la legislatura y, de este modo, convocar elecciones autonómicas por separado, porque genera la oportunidad de abrir un debate "exclusivo sobre los problemas de Andalucía", y precisó que, "si cambia de intención, estará plegándose a los intereses del PSOE, y no de la comunidad".

Además, en declaraciones a Europa Press, Carbonero señaló que dicha decisión le parece "lógica" porque el Ejecutivo de Griñán "gobierna con mayoría absoluta", a la vez que se mostró convencido de que en Andalucía "no es necesario un adelanto electoral". En cambio, Carbonero sí dijo estar conforme con el adelanto de las generales.