Andalucía destaca como la comunidad con más población emprendedora de España en el 2016, con el 21 % del total, pero tiene una baja tasa de consolidación de las empresas, lo que hace que se mantenga la brecha histórica en densidad empresarial en la región con el resto del país.

Esta es una de las conclusiones recogidas en el informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) Andalucía 2016, un programa de investigación internacional en el que participan sesenta países y que mide la capacidad emprendedora de los territorios, que ha sido presentado en la Confederación de Empresarios de Andalucía.

Un total de 340.000 personas estuvieron involucradas en un proyecto empresarial en Andalucía en el 2016, pero no cuajan el número suficiente porque las iniciativas en los años posteriores a la crisis estaban más motivadas por la necesidad ante el alto desempleo y menos por motivos de oportunidad o valor añadido.

Por tasa de actividad emprendedora, que va desde el inicio del proyecto hasta 42 meses después, Andalucía es la primera región de España en términos relativos al concentrar en esta etapa un seis por ciento de la población andaluza frente al 6,2 % de España.

Sin embargo, en la fase de consolidación del proyecto el número de personas inmersas en Andalucía fue del 3,1 % y en España del 6,2 %.

Esta baja tasa de consolidación no permite corregir la brecha histórica en la densidad empresarial en la región (5,8 empresas por cada cien habitantes) en comparación con la media de España (6,9), y aumenta si se refiere a empresas de más de cien empleados de 1,3 por cada 10.000 habitantes en Andalucía, y 2,5 en España.

PERFIL DEL EMPRENDEDOR

El perfil del emprendedor andaluz son hombres (56 % de los casos), porcentaje similar al de españa, y las mujeres aumentan de forma similar a la evolución del resto del país, aunque hace diez años tenían una menor participación.

La edad media de las personas que emprenden rondan los cuarenta años y un 38 % tiene estudios universitarios, aspecto en el que Andalucía ha aumentado de forma notable desde el 2003 y se acerca al 40 % de media nacional.

Según el informe, la mayor parte de las iniciativas son proyectos unipersonales con escasas perspectivas de crecimiento, bien por la intencionalidad del promotor, por la escasez de recursos o por la falta de capacidad empresarial.