La Junta de Andalucía ha comenzado a aplicar desde ayer, 16 de enero, la jornada laboral de 35 horas semanales en el sector público, una medida consensuada con los sindicatos y respaldada por el Parlamento andaluz, aunque incierta ante un hipotético recurso por parte del Gobierno. No obstante, la Junta ha interpretado como un «un gesto de buena voluntad» el aplazamiento de la reunión prevista para mañana miércoles de la Comisión Bilateral de Cooperación entre la Junta y el Gobierno, en la que se iba a abordar el contencioso de la jornada de 35 horas.

Sin embargo, la secretaria general del PP andaluz, Dolores López, considera que Susana Díaz ha buscado «dinamitar» un posible acuerdo con el Gobierno central sobre la restitución de la jornada laboral de 35 horas a los empleados públicos con la «artimaña» de empezar a aplicarlo unos días antes de la reunión que estaba convocada.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, informó de que el aplazamiento de la reunión le ha sido comunicado en conversación telefónica y que no se ha fijado, de momento, una nueva fecha.

La implantación de la jornada laboral de 35 horas para unos 260.000 empleados deja en suspenso la decisión del Gobierno, que la aumentó a 37,5 horas en 2012 en todo el Estado para hacer frente a la crisis económica.Según Montero, la reducción de jornada supone una «oportunidad laboral» porque puede generar entre 7.000 y 10.000 empleos y recordó que la Junta dispone de la suficiencia financiera adecuada y plenas competencias para regular en materia de jornada laboral, como establece el Estatuto Básico del Empleado Público.

Asimismo, antes de implantar esta medida, el Consejo de Gobierno de la Junta aprobó un decreto ley que convalidó el Parlamento el pasado noviembre, con los votos del PSOE, Podemos e IU y la abstención del PP y Ciudadanos. Con carácter general, la medida supondrá trabajar dos horas y media menos a la semana; en el ámbito sanitario se modifican los cómputos anuales de cada turno, de modo que el nocturno pasa a 1.450 horas anuales, el rotatorio a 1.483 y el diurno de 1.645 a 1.540, es decir, 105 horas menos. En el ámbito educativo, aunque se aplica para el personal de administración, la disminución de las horas lectivas de los docentes se hará efectiva a partir de septiembre.