El documental Calvas & Bellas es un espacio íntimo y cercano, que abre sus puertas a todas las mujeres que viven la alopecia en su propio cuerpo, pero también a toda una sociedad para liberarla de los prejuicios. Más de la mitad de quienes padecen cáncer de mama, la experimentan. Y, en muchos casos, va acompañada de sufrimiento.

Sin embargo, cuando esta se convierte en un motor de crecimiento, puede desencadenar un movimiento como Calvas & Bellas. El proyecto, promovido por Juan de la Haba, doctor referente en oncología y experto en cáncer de mama, con la colaboración de la Hospital San Juan de Dios y el Hospital Universitario Reina Sofía, tiene un largo recorrido, que ha ido desde la exposición física en el centro de Córdoba hasta un viaje online por las imágenes de las protagonistas. Ahora, el trabajo va un paso más allá y pone voz a las mujeres.

«La exposición fotográfica en un lugar físico iba a ser algo efímero, con esto se busca perdurar», explica Javier Cantero, director de producción. Y pisando fuerte, el proyecto busca desde un principio cambiar los prejuicios sobre la belleza femenina, normalizar la situación de muchas personas e inspirar y ayudar a otras pacientes. Por eso, cualquier persona puede encontrar en Youtube el documental completo, en el que las protagonistas hablan sobre su expeciencia con la enfermedad y dentro de un proyecto que las sorprendió. «Ni me había planteado hacerme una foto sin peluca», cuenta frente a las cámaras una de ellas. «Que te hagan fotos calva y bella, no sé, a la sociedad a lo mejor le va a sonar un poquillo raro», dice una de las mujeres con un guiño en el ojo.

La normalización, a veces, es un camino largo y duro. «Nunca te muestran que estando calva puedes estar bien», reconoce una protagonista. «Es que realmente es una forma en la que puedes ayudar a otras personas», añade orgullosa. Cuando se trata de apoyarse entre ellas, las barreras no caben. En cierta medida, así comenzó todo. Juan de la Haba, en su consulta, apreció que había algo que se quedaba fuera cuando hablaba con sus ellas, explica Javier Cantero. Entonces, decidió hacer una pregunta: «¿En qué puedo ayudarte?». Y de una cuestión tan simple pero, a la vez, tan relevante, brotó el movimiento. Movimiento, porque no para. A raíz de esa pregunta, el doctor notó el problema que suponía para muchas mujeres vivir la alopecia en primera persona. Por eso, decidió compartir información de interés en Facebook. Lo demás, llegó solo. Las mujeres comenzaron a compartir fotografías y experiencias, un diálogo que, finalmente, se transformó en un proyecto más amplio que lleva el mismo nombre: ¿En qué puedo ayudarte?

Este no tiene límites, el documental es solo una parte, pero llegarán más cosas, confiesa el director de producción. El audiovisual ha tenido «muy buena respuesta», comenta. «Muchas pacientes lo comparten, crean conversación entre ellas», detalla. Además, se trata de un proyecto que se retroalimenta gracias a las propias pacientes. Todas tienen las puertas abiertas. Y prueba de ello es la galería de fotografías cooperativa A pelo, donde toda la que lo desee puede aportar su granito de arena y subir imágenes personales. Todo suma. Porque la vida son ellas y «se puede seguir adelante», dice una de las protagonistas en el documental. «Si tú transmites belleza, te van a ver bella», concluye.