Kunfanuntee es una de las palabras que los Hermanos Moreno, compañía de teatro y circo cordobesa, aprendió del mandinga (idioma local) antes de viajar a Gambia con el fin de aportar cercanía a su relación con la población local. Kunfanuntee significa magia y bien podría definir la experiencia que Pepe y Willy, acompañados por la educadora social Raquel, han vivido en el país africano, al que viajaron con la única intención de regalar alegría y buen humor. «Volvimos el domingo por la noche y venimos con las pilas bien cargadas para mucho tiempo», explica Pepe, emocionado por la respuesta que han recibido de los niños y niñas gambianas. «Para muchos de ellos era la primera vez que asistían a un espectáculo como el nuestro, con malabares, monociclos, payasos, globos y la reacción es espectacular por las caras de sorpresa y las risas que te regalan», comenta, «se quedan pasamados al ver a dos adultos blanquitos vestidos con tutús rosas, jugando y haciendo todo tipo de locuras para ellos». Como ocurre en estos casos, el lenguaje de la mímica, el circo y el humor es universal. Para ellos también era la primera vez en Gambia. «Hemos estado en el Sáhara y en Grecia, pero queríamos apoyar el proyecto que llevan a cabo desde hace diez años nuestros colegas Jon y Elena, que han construido allí la cabaña solidaria Kaira Kunda, que significa lugar de paz y que alquilan a turistas para obtener fondos que destinan a financiar el centro de salud de Gunjur, a la escuela de Infantil y Primaria Kenali, a comprar medicinas y becar a alumnos».

La aportación de los Hermanos Moreno con esta visita, financiada con sus propios ahorros, era la de «apoyar el proyecto con risas solidarias», ya que en un entorno empobrecido como el de Gambia, las actividades de entretenimiento como las que ellos ofrecen en Córdoba no existen allí. «La educación y la salud son muy importantes y en eso están trabajando Jon y Elena, porque hay mucha precariedad, pero hablamos de niños y niñas que también necesitan reírse y pasarlo bien». Uno de los idiomas tribales de Gambia es el mandinga, que Pepe y Willi han aprendido a vocalizar sin perder «el acento cordobés». «Hemos aprendido algunas palabras como continatale, que significa feliz, isama, que es buenos días, abarakaa, gracias y katti, que se traduce como volar, además de kunfanuntee, que en español significa magia». Compartir el idioma aunque sea mínimamente «les muestra el interés que tienes por ellos y te ayuda a relacionarte». En la maleta de ambos, junto a la ropa, las narices rojas y las medias de colores iba material escolar adquirido con ayuda de varias entidades que han entregado en la escuela y a familias desfavorecidas de la aldea. «Había muy pocos habitantes adultos, pero muchísimos niños y niñas», ha destacado Pepe.