Treinta y ocho niños, principalmente de países africanos con escasos recursos, han sido intervenidos desde el 2010 en el hospital Reina Sofía de las graves cardiopatías congénitas que padecían y han vuelto con sus familias recuperados, gracias a la mediación de la fundación Tierra de Hombres. «La evolución de estos pequeños se puede calificar de milagrosa», señala el delegado de esta institución en Córdoba, Luis Chamorro, que junto a su mujer, Toñi Vidal, han acogido en su casa de Córdoba a Ella, una niña de seis años de Benin. Ella llegó en agosto y está a punto de volver a su país ya curada.

Es el cuarto acogimiento que asumen Luis y Toñi, a raíz de la colaboración que mantienen con Tierra de Hombres, y que permite traer a España, en este caso a Córdoba, a niños que no pueden operarse en sus países de origen de las graves cardiopatías que presentan. Se da además la circunstancia que Toñi y Luis tienen ahora mismo en acogida a otros tres niños más, con cargo al programa de acogimiento familiar de la Junta de Andalucía, y en navidades se juntaron en casa con otro menor más procedente de otro plan de apoyo a la infancia menos favorecida, chico al que acogen en vacaciones y fines de semana, un total de cinco niños, a los que esta pareja les transmite su inagotable amor y dedicación. «Aunque por nuestra casa han pasado en los últimos años otros tres niños africanos que han venido a operarse al Reina Sofía y que estaban muy delicados de salud, el caso de Ella ha sido sorprendente. Estaba tan delicada que la teníamos que llevar en carrito cuando llegó y el cambio después de la operación fue espectacular. Y eso que estuvo dos semanas muy crítica en cuidados intensivos, pues el postoperatorio se complicó mucho», cuenta Luis Chamorro. Toñi y Luis pronto acogerán a otro menor que está a punto de llegar a Córdoba. «Echaremos mucho de menos a Ella, pero nos cabe la tranquilidad de que vuelve con su familia, ya por fin sana», destaca el delegado de Tierra de Hombres en Córdoba.

Ayer también se marchó, en este caso a Mauritania, otro menor, Mohamed, de 18 meses, que ha estado acogido en Posadas por Alfonso Paredes y Carmen Bocero, y que vino también para ser operado de una cardiopatía en el Reina Sofía. Carmen resalta «lo enriquecedor que supone acoger a un niño de estas características, porque no solo te permite respaldarle durante su recuperación, a pesar de lo delicados que llegan, sino que te aportan mucho cariño y aprendes de ellos otras costumbres y culturas. «Llegó muy delgado y se marcha rellenito. Se necesitan más familias de acogida para que Tierra de Hombres pueda seguir trayendo a pequeños enfermos para que sean intervenidos en hospitales como el Reina Sofía, centro donde les brindan la mejor de las atenciones». Es el segundo acogimiento que han realizado Carmen y Alfonso con Tierra de Hombres y no descartan incrementar la colaboración.

«Hay personas que dicen que no serían capaces de acoger a estos menores, pero sí somos todos capaces de dar amor, porque de eso es lo que trata este programa y del papel que desempeñan en concreto las familias de acogida», añade Carmen. Tierra de Hombres cumple con el traslado de los niños desde sus países a España y en apoyarlos a través de programa Viaje hacia la vida; los profesionales sanitarios aportan todo su saber en tratar de curarlos y las familias de acogida les abren sus casas, sus familias y sus vidas durante su estancia.