El Archivo municipal de Córdoba nació por motivos de seguridad. Se tiene constancia documental de su existencia en 1327, cuando el entonces Archivo del Concejo estaba en el antiguo convento de San Pablo. En él comenzaron a custodiarse documentos acreditativos otorgados por los monarcas, y que debían ser custodiados por los concejos medievales (ayuntamientos). Estos los guardaban celosamente en «un arca de las tres llaves, cada una de las cuales estaba en poder de un diputado llavero». Cuando el arca se hizo insuficiente, pues la burocracia municipal no paraba de crecer, el Archivo fue buscando ubicaciones más y más amplias, para terminar en 1969 en la preciosa casa solariega de los Guzmanes, un edificio de finales del siglo XV.

El Ayuntamiento de Córdoba ha querido celebrar estos 50 años desde la última mudanza de esta casa de la memoria con una exposición de fotografías de gran tamaño, la publicación de un libro y visitas guiadas, entre otras actividades. El teniente de alcalde de Presidencia, Emilio Aumente, compareció ayer, junto a la directora del archivo, Ana Verdú, para informar sobre este cumpleaños, que coincide con la buena marcha de la obra de rehabilitación del archivo.

Córdoba, 100 fotografías para la historia es el nombre de la exposición de fotos de gran formato, que ha sido comisariada por el fotógrafo de Diario CÓRDOBA Antonio Jesús González, que podrá verse en distintos puntos de la ciudad y mostrará imágenes históricas de principios de siglo. Así, las grandes lonas y mupis se ubicarán en la calle Capitulares, Claudio Marcelo, las Tendillas, el IES Góngora y la plaza de Colón. La selección cuenta con algunos de los mejores fotógrafos de la historia, que captaron con sus cámaras la ciudad, como Henri Cartier Bresson, Robert Capa, Josef Koudelka, Charles Clifford o Jean Laurent, así como un amplio y destacado grupo de autores locales.

Salvando una pequeña reforma que se llevó a cabo en los años 80, la obra que actualmente se desarrolla en la Casa de los Guzmanez es la de mayor envergadura que se acomete en este edificio patrimonial y BIC. «Queremos ser muy respetuosos con el edificio para devolverle sus características y esplendor», indicó ayer Ana Verdú, a la que le gustaría que el Archivo se pasara a llamar la casa de la memoria. La obra, que ha sacado a la luz algunos restos mudéjares, dotará al edificio de medidas más extremas de seguridad y del sistema más sofisticado que hay en la actualidad para evitar incendios, el gran enemigo de los archivos. Además, los actos del 50 aniversario incluirán la presentación del libro del mismo nombre, Córdoba, 100 fotografías para la historia, impreso por la Diputación; así como un acto el día 13 de marzo en el Teatro Góngora, en el que se recordará la historia de las Electromecánicas. Además, se hará un homenaje a José López Amo, uno de los archiveros más destacados, en cuya calle, en el barrio de Valdeolleros, se pondrá una placa recordando su legado.

Además, se van a organizar tres visitas guiadas a la obra del Archivo el próximo 9 de marzo, que serán de grupos de 25 personas por cuestiones de seguridad y en las que el arqueólogo que interviene en el proyecto explicará los hallazgos encontrados. Por último, el Ayuntamiento pedirá al Consejo de Europa que se incluya Córdoba en el itinerario sobre Carlos V, habida cuenta de que el Archivo posee documentos de las dos visitas del monarca a la ciudad en 1526 y 1533.