Una temporada más, el objetivo más ambicioso que puede marcarse el Córdoba CF --un pobre objetivo-- es el de mantenerse en Segunda A. Vinculado a los puestos de descenso, con una única victoria liguera fuera de casa contra el Tenerife y una nueva derrota el pasado viernes ante el Granada, el club lanza la campaña #CompromisoBlanquiverde, con la que pretende reactivar la ilusión y fortalecerse. La semana pasada, el Córdoba apeló a su afición, de la que no puede tener queja, pues es sin duda de las más fieles de España. Bien estuvieron, por tanto, los gestos con los abonados, desde las entradas a precios populares hasta los detalles regalados por azafatas en las calles y el encuentro con los jugadores el pasado viernes antes del partido. El equipo ha sido reforzado, en la medida en que lo ha permitido la situación del club, en el mercado de invierno, y parece dispuesto a afrontar con un talante más combativo lo que queda de liga. Independientemente de los últimos resultados, la llamada del Córdoba es a futuro. Necesita el compromiso de su afición, que no lo ha abandonado ni en sus peores momentos, pero a la que debe resultados. Necesita el apoyo de su ciudad, de sus empresas, patrocinadores e instituciones, necesita fuerza para crecer. Y para ello es necesario que los propietarios, entrenador y jugadores sean los primeros en sostener ese compromiso blanquiverde que reclaman.