Con el paso del Resucitado, que procesiona la Agrupación General de Hermandades y Cofradías, que salió a las 12.00 horas de la iglesia parroquial de Santo Domingo de Guzmán, se puso fin el pasado 21 de abril, Domingo de Resurrección, a una Semana Santa marcada por la lluvia en algunos de sus días.

Así, Cabra puso el epílogo con especial pasión a su Semana Mayor, poniendo de importancia un año más su rico patrimonio procesional, tanto en el histórico y antiguo como en el de nuevo cuño y que se ha ido sumando en los últimos años a los cortejos que de Domingo de Ramos a Domingo de Resurrección, ocupan todos los días las calles egabrenses. Unos días en los que no acompañó el buen tiempo por la presencia de la lluvia y que no evitó la alta participación de ciudadanos en cada uno de los rincones y plazas, sobre todo en aquellos lugares marcados por las salidas y entradas de cada uno de los pasos procesionales.

Días de júbilo tanto para los cofrades y fieles como para aquellos, que no quisieron perderse los cortejos procesionales desde las primeras de la mañana y hasta las más tardías de la noche.

Las precipitaciones rompieron la madrugada del Jueves Santo, impidiendo la salida del Cristo de la Expiración. Luego, en el mediodía del Viernes Santo, la lluvia hizo que regresaran apresuradamente a la iglesia de la Asunción y Ángeles los pasos del Mayor Dolor y Nazareno, a los que el agua sorprendió en plena calle. Algo que se volvió a repetir por la noche en los recorridos que hicieron los cortejos procesionales del Rocío de Pasión, Descendimiento, Nuestra Señora de las Angustias y Dolores.

Por su parte, el Sepulcro e Imperio Romano ni tan siquiera llegó a salir de la iglesia de la Asunción y Ángeles ante la incomparecencia de un buen número de costaleros de su cuadrilla.

Toda una serie de sensaciones que fueron objeto de especial atención por varios cientos de personas que se acercaron un año más el Sábado Santo a Cabra, para ver de cerca a la imagen de la Soledad que por segundo año consecutivo se vio acompañada por los legionarios. En esta ocasión por la banda de tambores y cornetas del Tercio de la Legión de Almería y escuadra de gastadores y la Sinfónica Municipal de Ogíjares (Granada). Un cortejo en el que participó el consejero de Hacienda, Industria y Energía de la Junta de Andalucía, Juan Bravo. Antes, en el mediodía del domingo 7 de abril, la llegada inminente de la Semana Santa en Cabra la anunció en el Teatro El Jardinito el economista y cofrade Rafael Mesa Morena, que en este año tuvo la responsabilidad de realizar el pregón, donde exaltó no solo las excelencias de aquélla sino también la labor de las aportaciones que a favor de la misma hacen cada uno de los cofrades y las hermandades egabrenses, tras ser presentado por Antonio José Grande Gutiérrez y acompañado musicalmente por la Banda de Música de Cabra.

Una tónica que marcó el pregón de Mesa, en el que mostró su lado más íntimo y personal, vaciando sus sentimientos y devociones, entre las que se encuentra su Cristo de la Expiración, del que fue hermano mayor.