Cuando la programación Donde brillan las estrellas llegue este 2 de septiembre a su término en el Auditorio Municipal Alcalde Juan Muñoz con el violín flamenco del cordobés Paco Montalvo, se pondrá término a una oferta veraniega cultural, musical y lúdica que de nuevo un año más, y especialmente como viene sucediendo en los últimos, ha reubicado a este espacio escénico al aire libre como uno de los lugares más destacados del sur de Córdoba y del centro de Andalucía para vivir la Cultura en los meses de calor.

Y lo demuestran no sólo las mayores o menores taquillas conseguidas en uno u otro espectáculo, sino la afluencia de espectadores que hasta él se han acercado para disfrutar de aquellas citas, artistas o eventos de las que son fieles seguidores, llegando en algunos casos desde fuera de Cabra, como así ocurriera en sus primeros años desde que abriera sus puertas el 15 de agosto de 1990.

Un verano que ha permitido disfrutar de una veintena de actuaciones que desde conciertos a representaciones teatrales y varias galas, en algún caso de carácter benéfico, han estado dirigidas prácticamente a todo tipo de público.

Así, en el caso del último mes, citas como el Egarock con la participación de varios grupos de diferentes estilos como Asvant, Papawanda, Noxfilia y Stringers, una de las mejores bandas tributo a Scorpions junto a Cristosaurio, primer premio del festival Cabra Sound.

Un festival este en el que los finalistas recibieron su premio dotado con 1.200 euros y trofeo, en el marco de una noche de Rock & Roll Star con los grandes artistas del rock nacional como Manuel España de La Guardia, Javier Ojeda de Danza Invisible o Javier Andreu de La Frontera, que hicieron vibrar y saltar al público asistente.

Música que no faltó tampoco con otro festival, caso de Aquellos Maravillosos Años, que también recuperó sonidos ochenteros y de principios de los 90 con los tributos y homenaje de Robin Torres con su espectáculo Hija de la Luna, que por segundo año consecutivo pisaba este escenario junto a Alejados e Iberia Sumergida, para recordar a los grupos Mecano, El Último de la Fila y Héroes del Silencio, respectivamente, durante algo más de cuatro horas.

Además también de otra cita obligada cada verano como fue el Festival del Carnaval con la presencia de los grupos gaditanos Tic Tac Tic Tac, de Tino Tovar, Los Prisioneros, de Ángel Subiela, Grupo de Guasa, de Selu, No tenemo el congo pa farolillo, de Vera Luque, El Perro Andalú, de Martínez Ares, y Los Mafiosos, de Juan Carlos Aragón.

Y en el caso del flamenco, el arte del cantaor jerezano José Mercé se presentaba con su espectáculo Mercé Sinfónico, con el que en los últimos meses está recorriendo toda la geografía española y donde acompañado por una orquesta sinfónica y un amplio y variado repertorio de canciones de diferentes álbumes de su discografía, como Al alba, Del amanecer o Lío, entre otros, puso en escena unas adaptaciones de calidad llevadas al terreno de lo clásico, que han marcado su extensa carrera y que lo sitúan en la vanguardia del cante jondo y la gran canción popular andaluza contemporánea.

Además de entre otros, la expectación provocada desde meses antes con uno de los platos fuertes de la programación. El cantante y compositor Antonio Orozco, ya semanas antes vio como se agotaban las entradas para su concierto enmarcado en la gira Summer Club 18 y en el que en el que repasó los éxitos de sus 19 años de carrera con temas como Devuélveme la vida, Estoy hecho de pedacitos de ti o Mi héroe.

En definitiva Donde brillan las estrellas dio respuesta satisfactoria a prácticamente todos los públicos en un espacio escénico al aire libre que se ha visto mejorado y renovado con la ampliación de su graderío al dotarse de 250 asientos más y alcanzar así un total de 1.752 asientos que han sido numerados de cara a mejorar el acceso a los mismos con el fin de disminuir los tiempos de espera y las colas de acceso, ya de cara a la temporada del verano del 2019.