Felipe VI expresó hoy su orgullo por la labor que está desempeñando la misión militar española en Irak, una tarea que llevan a cabo tropas de la Brigada Guzmán el Bueno X de Cerro Muriano y que, subrayó, es en beneficio del progreso y la estabilidad del país y en favor "de la seguridad de todos", informa Efe. El rey trasladó este mensaje al primer grupo de miembros de la misión militar española con los que se reunió en Bagdad con motivo de la visita que ha realizado en coincidencia con la jornada en la que cumple 51 años.

En el hangar español de las instalaciones aeroportuarias de la capital iraquí, el monarca, vestido con uniforme militar de campaña, conversó con los integrantes de la Task Force Toro, la unidad de helicópteros que participa en esta misión.

A todos ellos les expresó su orgullo como español, como rey y como militar por la tarea que están realizando y resaltó la labor que están desempeñando para el progreso de Irak. Pero también hizo hincapié en que esa tarea se desarrolla "por la seguridad de todos". "Por eso estamos aquí", recalcó el rey antes de reiterar su agradecimiento a los militares por lo que están haciendo y por cómo lo están llevando a cabo.

Reconoció el rey el trabajo duro que realizan y el sacrificio que supone estar tanto tiempo fuera de casa, al tiempo que les reiteró la trascendencia de la misión que están llevando a cabo.

Tras recordar que era la primera vez que estaba en Irak, resaltó igualmente el esfuerzo de todos los países aliados en su lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI).

Tras sus palabras y mientras departía con los militares, éstos le cantaron el "cumpleaños feliz".

El rey se reunió previamente con el comandante de la operación Inherent Resolve, el general estadounidense Paul J.Lacamera, y tras su encuentro con los militares españoles se trasladó en helicóptero al Palacio Presidencial de Bagdad para entrevistarse con el presidente iraquí, Barham Salim.

Tras el encuentro, Su Majestad el Rey se trasladó a la Base Gran Capitán (Besmayah), donde fue recibido por jefe de la Fuerza en Besmayah, el general de brigada, Carlos Prada Larrea. Allí, Felipe VI, tras mantener una sesión informativa, realizó una visita por las instalaciones, mantuvo un encuentro con el contingente español y firmó el Libro de Honor.

La misión militar en Irak, con 551 efectivos, es la segunda más numerosa de las que tiene actualmente España en el exterior tras la del Líbano, que supera los 600, y tiene como principal cometido adiestrar al ejército iraquí contra el Daesh.

Los militares españoles allí desplegados en esta operación, forman parte de una coalición internacional integrada por 60 países y liderada por Estados Unidos. La coalición surgió en la Cumbre de la OTAN celebrada en Gales en septiembre de 2014, amparada por el Consejo de Seguridad de la ONU y cuenta con el apoyo expreso de la Unión Europea. El Congreso de los Diputados autorizó esta misión el 22 de octubre de 2014.

Hasta ahora han sido nueve las rotaciones españolas en esta misión, y la actual está formada principalmente por la Brigada Guzmán el Bueno X, que el pasado 22 de noviembre relevó a la Almogávares VI de paracaidistas. También forman parte del contingente español los militares pertenecientes a la Task Force Toro, unidad de helicópteros cuya misión principal es proporcionar transporte aéreo a las tropas de la coalición mediante aparatos Chinook y Cougar.

La coalición internacional se formó en respuesta a una petición del Gobierno iraquí a la ONU para intentar frenar el avance del Daesh, que se estima que cuenta en Irak con un mínimo de 30.000 combatientes.