El Real Madrid espera marcar territorio ante la mejor versión del Anadolu Efes de los últimos años, y conseguir una victoria que le afiance en los primeros puestos de la clasificación e impida que los turcos se acerquen a la lucha por ser cabeza de serie en los 'playoffs'.

El Real Madrid jugó en Estambul ante el Anadolu, en la primera vuelta, un último cuarto que se puede catalogar como de los mejores de la vigente campaña. El 8-24 de parcial sirvió para acabar ganando un partido que a diez minutos del final perdía por 74-60 y que finalizó 82-84.

"Estamos hablando de una de las mejores plantillas de Europa", dijo Pablo Laso, entrenador del Real Madrid, en la previa del partido y la clasificación del equipo turco, cuarto en la Euroliga, así lo corrobora.

Se van a enfrentar los dos mejores equipos en valoración, 106,16 el Real Madrid y 103,11 el Anadolu; el tercer y cuarto mejor anotador; el primer y el cuarto anotador de triples. Dos de los mejores equipos, en definitiva.

El Madrid, además, parece tenerle tomada la medida al Anadolu al que ha derrotado en las últimas seis ocasiones en la que se han enfrentado. Otro dato es que en las últimas once visitas de los turcos a Madrid salieron derrotados y que la última de sus dos únicas victorias en la capital de España fue hace 14 años.

Laso podrá contar con todos sus jugadores y tendrá que hacer cuatro descartes horas antes de que comience el partido. Uno de los mejores problemas que puede tener un técnico.

Dicho todo esto, el equipo turco tiene potencial para ganar a cualquier equipo en cualquier sitio y viene con una serie abierta de cuatro victorias consecutivas.

El Madrid ha tenido algunos tropiezos ante equipos débiles en teoría, tanto en la Liga Endesa (Breogán y Estudiantes) como en Euroliga, ante el Buducnost la semana pasada. Pero ha competido en todos los demás, máxime ante los rivales más cualificados.

Ante el Anadolu no caben despistes o falta de concentración. Es uno de los mejores partidos que se pueden ver en Europa en estos momentos y el Madrid quiere seguir en la posición de privilegio que ahora ocupa y evitar que los rivales le crezcan.