El Real Madrid se clasificó para la final de la Copa del Rey, cita a la que acudirá por sexta vez de forma consecutiva, tras vencer al Divina Seguros Joventut por 93-81, en un partido que dominó con claridad maniatando al argentino Nicolás Laprovittola.

Primero fue Fabien Causeur, después Jeff Taylor y también Facundo Campazzo, Sergio Llull y Jaycee Carroll, los que se encargaron de secar y agotar físicamente al base verdinegro.

Esto, unido al gran partido del mexicano Gustavo Ayón y del argentino Gabriel Deck y al dominio del rebote, fue suficiente para que el Real Madrid ganara sin demasiados apuros.

Nicolás Laprovittola salió a jugar con una pegatina, algo que ya sabían todos los aficionados al baloncesto. Y esa pegatina fue, en primera instancia, Causeur.

Después de la descomunal actuación en cuartos de final del base argentino estaba claro que el Real Madrid tendría una especial atención con él.

Frenado, al menos en su efectividad -2 puntos al final del primer cuarto- Laprovittola, el Joventut tuvo que tirar de los puntos de Marko Todorovic para mantenerse en el marcador y en el partido.

El hispano-mexicano Gustavo Ayón volvió a demostrar su buen hacer en los tableros y fue el que sentó las bases de la victoria parcial del Real Madrid, 26-18, al final de los primeros diez minutos. El Madrid también dominó en rebotes, 14-5.

En el segundo cuarto fue el turno de Jeff Taylor, el turno de hacer de sombra de Laprovittola, y el de las rotaciones. Walter Tavares se hizo el amo de los rebotes, Sergio Llull anotó una de las 5 'mandarinas' que lanzó y el Real Madrid se fue a los vestuarios con una decena de puntos de ventaja, 48-38.

El equipo verdinegro puso toda la ilusión del mundo en el partido y sólo los cuatro triples que consiguió anotar en este periodo le salvaron de la debacle. Porque además del marcador, el 26-12 en rebotes para los madridistas hacían difícil la explicación del 48-38. Laprovittola anotó 5 puntos al descanso.

En el tercer acto fue el turno de Jaycee Carroll y de Facundo Campazzo, el turno de defender al base sudamericano, siempre con las ayudas del resto del equipo.

Pese a todo, la Penya consiguió mantenerse firme e incluso recortar diferencias, 54-48 (m.24.15). Pero, igual que ocurrió en el primer cuarto, el Madrid reaccionó de inmediato para endosar un parcial de 8-0 en un minuto, 'mandarina' de Llull incluía.

El parcial se agrandó hasta un 12-0, 66-48 (m.28), personal antideportiva incluida de Laprovittola, que poco después cometió su cuarta falta, producto del agotamiento físico.

Así las cosas, el tercer cuarto finalizó con un 71-52 que prácticamente dejó a un paso al Real Madrid de la final.

En los últimos diez minutos, el equipo blanco se relajó inicialmente y el Joventut se acercó, 76-63 (m.32.30) gracias a los puntos de Conor Morgan, pero la experiencia del equipo de Pablo Laso le permitió cerrar el partido sin agobios, por 93-81, y clasificarse para su sexta final de Copa del Rey consecutiva.

- Ficha técnica:

93 - Real Madrid (26+22+23+22): Causeur (2), Randolph (15), Campazzo (16), Ayón (16) y Deck (11) -equipo inicial-, Rudy (3), Llull (8), Reyes (5), Carroll (5), Tavares (4) y Taylor (8).

81 - Divina Seguros Joventut (18+20+14+29): López-Aróstegui (4), Laprovittola (14), Todorovic (14), Harangody (13) y Ventura (12) -equipo inicial-, Dimitrijevic (4), Morgan (20), Delia, Nogués y Mathias.

Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Benjamín Jiménez y Fernando Calatrava. Sin eliminados.

Incidencias: Segunda semifinal de la Copa del Rey disputada en el Palacio de Deportes (WiZink Center) de Madrid ante unos 11.000 espectadores.

El Barça exhibe músculo y defenderá su corona

- El Barcelona Lassa acabó, con más suficiencia de la prevista, con el sueño copero del Iberostar Tenerife, al que desbordó durante gran parte de la primera semifinal (82-86), lo que le permitirá defender este domingo el título logrado en 2018.

A pesar de su meritoria reacción en el último cuarto, el equipo canario, que se había impuesto en cinco de los seis últimos enfrentamientos entre ambos, no fue rival para el líder de la Liga Endesa, que presentó su candidatura al triunfo en la que será su octava final de los últimos once años.

Los azulgranas salieron más enchufados a la pista, con Pau Ribas y Thomas Heurtel como principales argumentos ofensivos. Su férrea defensa asfixiaba una y otra vez a un equipo canario que tardó en carburar y al que le costaba un mundo culminar cada ataque.

Los tinerfeños, con solo cinco puntos en los seis minutos iniciales y varias pérdidas en su haber, dejaron vía libre a un Barça que aprovechaba para castigar cada error, por lo que las diferencias subieron rápidamente hasta los siete puntos.

Poco a poco, los de Txus Vidorreta fueron encontrando soluciones a su atasco ofensivo y cerrando su pintura con Colton Iverson como principal argumento. El choque se igualó al final de un primer cuarto algo espeso en el que las defensas se impusieron a los ataques (17-15, min 10)

Un parcial de 8-1, con dos triples de Kyle Kuric, permitió un nuevo despegue de los vigentes campeones, cuyo dominio en el rebote le garantizaba segundas opciones. Sin la fluidez en ataque ni la solidez defensiva que caracteriza a los isleños, el partido se empezó a romper antes de tiempo.

Adam Hanga, con ocho puntos, hurgó más en la herida y elevó a catorce la diferencia a 1.40 del descanso, al que se llegó con una clara ventaja azulgrana, basada en su dominio en la pintura y en las ocho perdidas tinerfeñas, que fueron castigadas con doce puntos por los de Svetislav Pesic (41-29).

El Iberostar pareció salir de vestuarios con otro aire en ataque y ganas de intentar la remontada, aunque sus tiradores no tenían su tarde y los triples de Pau Ribas y Víctor Claver y un par de aciertos de Heurtel les mantuvieron a raya y evitaron la rebelión.

La contundencia del equipo catalán se siguió imponiendo ante un oponente muy diferente al que derrotó al Unicaja en cuartos de final. A falta de buen juego y emoción, el público se distraía haciendo la ola mientras el partido quedaba finiquitado antes de tiempo con dos triples de Kevin Pangos que pusieron fin al tercer acto (72-52, min 30).

Los últimos diez minutos tuvieron poca historia. Con la semifinal decidida, los canarios, que tuvieron en Tim Abromaitis a su mejor hombre (24 puntos) y acusaron el flojo partido de Javier Beirán, siguieron intentándolo y, al menos, lograron maquillar el resultado.

La relajación final de los azulgranas puso al Iberostar a siete puntos en el ultimo minuto, pero la reacción llegó demasiado tarde y, aunque los de Vidorreta dominaron ampliamente el último cuarto, no pudieron evitar el triunfo del vigente campeón, que buscará este domingo revalidar la corona lograda en 2018.

- Ficha técnica:

92 - Barcelona Lassa (17+24+31+20): Heurtel (11), Ribas (14), Claver (7), Singleton (2), Tomic (4) -equipo inicial-, Pangos (12), Seraphin (10), Hanga (11), Kuric (12) y Oriola (9).

86 - Iberostar Tenerife (15+14+23+34): White (3), San Miguel (6), Beirán (2), Abromaitis (24), Iverson (3) -cinco inicial- Staiger (6), Richotti (3), Niang (-), Brussino (3), Bassas (13), Saiz (8) y Gillet (5).

Árbitros: Emilio Pérez Pizarro, Antonio Conde y Carlos Peruga. Eliminaron por dos técnicas al entrenador del Iberostar Tenerife, Txus Vidorreta (min. 40).

Incidencias: Primera semifinal de la Copa del Rey de baloncesto disputada en el WiZink Center ante 13.150 espectadores.