Las selecciones de España y Serbia, ya clasificadas para cuartos de final del Mundial de China, cerrarán este domingo la segunda fase con un partido entre ambas en el que está en juego el primer puesto del Grupo J y tras el cual quedarán trazados los cruces de la siguiente ronda.

Tras despachar el viernes en Wuhan a Italia y Puerto Rico, respectivamente, españoles y balcánicos suman cuatro triunfos en otras tantas actuaciones, por lo que uno de los dos dejará de estar invicto en un torneo en el que están dejando sensaciones diferentes.

Así, mientras que España solo cumplió en la primera fase en tres partidos ajustados y, al menos, mejoró sensiblemente ante Italia sobre todo en defensa, su próximo rival está arrasando a quien se le cruza en el camino.

Los jugadores que entrena Sasha Djordjevic debutaron destrozando a Angola (59-105), siguieron intratables ante Filipinas (126-67), despacharon a Italia en su partido menos cómodo (77-92) y no tuvieron rival en Puerto Rico, a la que el viernes doblegaron sin contemplaciones (90-47).

Se trata de una plantilla sobrada de calidad, en la que sobresalen sus dos torres, las estrellas de la NBA Boban Marjanovic y Nikola Jokic, bien secundados por otros compañeros en la liga estadounidense como Bogdan Bogdanovic o Nemanja Bjelica, bajo la dirección de Vasilije Micic.

Con una altura media superior a los dos metros, los balcánicos aparecen en todas las quinielas para luchar por el oro junto a Estados Unidos, a pesar de contar con alguna sensible baja como la de los lesionados Milos Teodosic o Dragan Milosavljevic. Son conscientes de que es su oportunidad y la quieren aprovechar.

El próximo rival de España es el vigente subcampeón mundial, olímpico y europeo, y llegó a China dispuesto a luchar por todo. Djordjevic ya avisó antes del torneo de que, si se cruzan en el camino de Estados Unidos, éstos deberían rezar todo lo que supieran.

Preguntado por la prensa española por cómo ve a la selección de Sergio Scariolo tras su irregular comienzo, el técnico balcánico aseguró que no se fía: "Yo, con toda la experiencia y sinceridad, os puedo decir que os he seguido en todos los campeonatos y siempre hacéis lo mismo cuando llegáis al final, a mí no me podéis engañar, quizás a otro, a mí no", dijo.

"Sé que España puede empezar un poco así, pero tiene muchísima experiencia (...) Quiero ganar a España porque pienso que es mejor y todavía tengo muchísimo respeto por su selección porque han demostrado en todos estos años saber ganar, siempre habéis acabado en el podio con las medallas. Yo he dicho a todo mi ambiente y a todos mis jugadores que hay que ganar a España", añadió.

El partido entre serbios españoles será el segundo que se juegue el domingo en el Sports Center de Wuhan y empezará a las 20.30 hora local (14.30, Cuatro), justo después del intrascendente Puerto Rico-Italia, en el que ya no hay nada en juego.