El último en llegar ha sido José Ramón Sandoval, que fue reclutado por el Fuenlabrada para conseguir la permanencia. El técnico de Humanes no tuvo la oportunidad de relatar ante los periodistas su catálogo de milagros -salvaciones de Granada y Córdoba CF, principalmente-, un argumento imbatible para levantar la moral de tropas alicaídas. No hubo lugar. La rueda de prensa en la que iba a ser presentado se canceló por la crisis del coronavirus. Cuando esta pesadilla termine y la competición se reanude, casi un tercio de los banquillos de la Segunda División estarán ocupados por entrenadores que tienen pasado en el Córdoba CF. Ahí queda el dato. La vida sigue para todos ellos en el mapa del fútbol profesional, al que la entidad blanquiverde quiere volver bajo la convulsión permanente de sus revoluciones, refundaciones, remodelaciones y esos procesos que tan dentro lleva. Mientras tanto, sus ex invaden los banquillos de Segunda.

José Ramón Sandoval (Fuenlabrada)

Desde que salió del Córdoba después de 14 jornadas en la liga 18-19, Sandoval esperaba nuevo destino. El Fuenlabrada destituyó a Mere Hermoso -el técnico que logró el histórico ascenso- y entregó las riendas al de Humanes apenas unas horas antes de que el fútbol se paralizada por la crisis del coronavirus. "Sé que llego a un club que es una familia y hay que mantener esa esencia", aseguró Sandoval a los medios del Fuenlabrada tras firmar el contrato. En el cordobesismo dejó huella por la salvación de junio del 18. No le renovaron. Le llamaron de nuevo y le despidieron a los cuatro meses.

José Luis Oltra (Racing de Santander)

Se incorporó sobre la marcha al histórico club cántabro, que ya despidió a Iván Ania y al prieguense Cristóbal Parralo antes de contratarle. Lleva cinco partidos al frente del equipo de El Sardinero. Con un currículum de ascensos a Primera -Levante, Tenerife, Deportivo-, el Córdoba de Carlos González le fichó tras el bochornoso descenso de Primera. Hizo la mejor primera vuelta de la historia blanquiverde en Segunda y cayó en la prórroga del play off de ascenso ante el Girona tras un arbitraje discutible y sin su estrella, Florin Andone, que se había marchado a la Eurocopa. Siguió al año siguiente, pero nada fue igual. Le echaron en noviembre. Luego pasó por el Granada y el Tenerife.

Luis Miguel Carrión (Numancia)

Fichó en verano por el Numancia y está despachando una más que notable campaña en el club soriano. Ex jugador del Córdoba, se proyectó desde el banquillo del filial y estuvo dos campañas incompletas en la primera plantilla. Le cesaron en la jornada 10 de la 17-18. Después de un curso formidable en el Melilla, de Segunda B, en la 18-19, ha retornado a la escena profesional a sus 41 años.

Curro Torres (Lugo)

Tras destituir a Eloy Jiménez, el club gallego le fichó para reflotar al equipo. Lleva diez partidos al frente con un balance discreto. En el Córdoba estuvo como puente entre Sandoval y Rafa Navarro en la campaña 18-19, que concluyó con el descenso a Segunda B.

Paco Jémez (Rayo Vallecano)

En Vallecas ha encontrado su razón de ser como entrenador. A Paco lo recuerda el cordobesismo por haber firmado, en la temporada 11-12, los mejores números de la entidad blanquiverde en 40 años: sexto en Segunda División, con 71 puntos, y un play off que se cerró sin resultado positivo ante el Valladolid. Lleva en el Rayo desde finales del campeonato 18-19, en su segunda etapa en el banquillo y tercera si se añade su época como jugador.

Lucas Alcaraz (Albacete)

El granadino tiene una marca histórica. Es el único entrenador que ha desarrollado su trabajo durante dos temporadas consecutivas completas sin mediar un ascenso de categoría. Estuvo en las ligas 09-10 y 10-11 en Segunda, saldadas con salvaciones holgadas. Desde entonces, solo un curso de principio a fin: Granada 13-14 en Primera. El Albacete le fichó para suplir al cesado Ramis tras la jornada 26 de Segunda.

Miroslav Djukic (Sporting)

El serbio regresó a España para tomar las riendas del cuadro asturiano, con el rumbo torcido tras la etapa de José Alberto. El último banquillo en el que había trabajado en la Liga fue el del Córdoba, en la etapa en Primera División. Suplió a Ferrer y terminó siendo cesado para que el equipo, ya en fase terminal, acabara con José Antonio Romero al frente. El Al Shahab de Emiratos Árabes y el Partizán de Belgrado, en su país, fueron sus anteriores escalas.

'Bonus track': el caso de López Garai

El de Barakaldo inició la temporada 19-10 en el banquillo del Tenerife, que confió en él tras sus etapas de fogueo como entrenador novel en el Reus y el Numancia. El club chicharrero le destituyó en la jornada 16 para sustituirle por Sesé Rivero y después Rubén Baraja. En su etapa de jugador, López Garai defendió la camiseta del Córdoba en Segunda y en Primera, llegando a llevar el brazalete de capitán.