Pese a la contundente victoria ante el Oviedo, Carrión solo sonrió una vez en los casi cinco minutos de comparecencia, algo que el catalán justificó de manera sincera. «Estaré satisfecho el día que estemos salvados y, aparte, tampoco creo que sea para estar tan felices porque nos habremos salvado, pero realmente, haciendo análisis, la temporada no es buena. Podemos estar felices por conseguir la victoria, por los jugadores, porque están dando un buen nivel, pero si queremos ser un equipo grande o aspiramos a ello, hay que analizar lo que se ha hecho mal».

Centrado en lo meramente deportivo, el técnico tenía claro que la clave del choque fue el principio. «El partido queda marcado por el inicio. Hemos entrado mejor en el partido que ellos. Desde el calentamiento veía las caras y si a la intensidad sumas dos goles... Además, el equipo no ha decaído en ningún momento. En la primera parte ellos tuvieron más el balón a partir del 3-0, pero lo controlamos bien. En la segunda, el partido fue más pausado», relató el catalán.

Carrión no quiso dar por cerrada la permanencia, si bien es consciente de que su equipo la tiene prácticamente conseguida. «No quiero ser pesimista, pero nos queda un punto para conseguirlo. Todavía no hay nada hecho, aunque hemos dado un gran paso. Llevamos una racha de partidos buena y tenemos que ir a Vallecas a conseguir los tres puntos», avanzó. Ni siquiera lo tranquilizó el hecho de que sus rivales no se vayan a jugar nada, siempre que el Girona logre el ascenso la próxima jornada. «Pero son buenos, ¿no?», preguntó el entrenador. «Llevamos una racha de partidos buena y tenemos que depender de nosotros mismos», apuntó. «Está siendo un año difícil y esperemos acabarlo bien».

Al ser preguntado por Javi Galán, Carrión solo tuvo palabras de elogio. «Lo conozco muy bien, lo trajimos para el B e hizo un buen año. Luego estuvo sin jugar por el cambio de sistema y me alegro de que le esté yendo tan bien, de todo lo que está dando. Ha ido de la mano conmigo y me alegro del nivel que está dando, que es altísimo para la categoría, y estoy seguro de que va a ser un jugador de futuro increíble, y lo tenemos aquí».

La afición blanquiverde no se ha llevado muchas alegrías, por lo que saboreó especialmente la de ayer. «Hay que valorar lo que estamos haciendo por ser un equipo que está abajo, con presión, y por eso hay que alabar a los jugadores».