Semana complicada para el Córdoba tras el duro correctivo sufrido ante el Lugo en El Arcángel (0-4). Sobre ese día, el entrenador blanquiverde, Rafa Navarro, subrayó que «debemos ser conscientes de que el partido del Lugo no se debe repetir; tanto el club como la afición no se merecen esa imagen». El de Ciudad Jardín resaltó que «cada jugador que se pone la camiseta del Córdoba, o de cualquier club que le pague, debe ser profesional (...) Hacen falta jugadores con personalidad y que no se hundan ante la situación que se puede generar».

La derrota ante le cuadro lucense deja al Córdoba a 11 puntos, más el golaverage, de la permanencia a falta de ocho jornadas para el final (24 puntos en juego). «Sabemos que el objetivo de la permanencia es complicado, más aún desde el pasado domingo, pero las matemáticas todavía nos enseñan que es posible».

UN RIVAL DE ‘PLAY-OFF’

Sobre su rival del próximo domingo, el Real Oviedo, Navarro subrayó que «es un equipo construido para jugar el play-off play-offde ascenso y en su estadio, sobre todo, son muy fuertes». Pero el técnico cordobesista no quiso mirar más allá y «solo pienso en mi equipo». El de Cuidad Jardín insistió en que «debemos ser compactos y hacer un trabajo muchísimo más intenso en defensa, más de lo que lo hacemos últimamente y si no eres fuerte y agresivo, cualquier equipo te pasa por encima puesto que la Segunda División es una categoría muy dura en la que todos los equipos tienen buenos jugadores». En definitiva, el entrenador del Córdoba sentenció que en esta recta final «no debemos equivocarnos y elegir el mejor once cada domingo». Un once que en Oviedo «tendrá algunos cambios», aseguró Navarro.

BLOQUEO MENTAL

Rafa Navarro quiso anunciar que Piovaccari y Vallejo estarán listos para la cita del domingo, mientras que Carrillo y Flaño estarán descartados. En referencia a la plantilla, el técnico blanquiverde reconoció que «hay jugadores que ahora mismo no soportan la presión del ambiente que se genera alrededor y para ello, hay que estar preparado física y mentalmente». Navarro también apostilló sobre el estado psicológico de sus jugadores. «Los chicos entrenan bien durante la semana, pero después llegan la hora de los partidos y no juegan como se entrena, por lo que existe un bloqueo mental». Pese a ello, el de Ciudad Jardín fue contundente al señalar que «nadie se ha borrado».