RAFA NAVARRO / UN CASTIGO

Tuvo que recordar que es el cuarto entrenador del curso

Aunque esta ciudad y esta afición sean, como mínimo, injustas en ocasiones, nadie le quitará a Rafa Navarro ser parte del escudo. El preparador blanquiverde tuvo que recordar que antes que con él, el equipo no funcionó con otros tres entrenadores y que incluso el club intentó traer a algún entrenador antes de aceptar el puesto de técnico del primer equipo, algo que hizo, entre otros motivos, por el compromiso que muchos piden a los jugadores. Algunas de sus decisiones son más que discutibles, pero también tomadas en una situación más que delicada. Para el equipo y el club.

ANDRÉS MARTÍN / LÁSTIMA

Mereció anotar algún gol y se topó con la madera dos veces

De los pocos jugadores, por no decir el único, que obliga a los rivales a correr hacia atrás. Al único, además, que se le ve correr a los espacios y también el único que mantiene claramente una mínima tensión competitiva, algo que muchos de sus compañero no ha mantenido en toda la temporada. El chaval terminará yéndose del Córdoba a cambio de un traspaso que le vendrá de perlas al club -que deberá tener más cuidado con el tunante de lo que tuvo en diciembre- y que debe suponer una catapulta a mejores cotas deportivas. Tiene las condiciones.

EL PALCO / BLANCO DE LAS IRAS

En poco más de un año, León ya oye cánticos en El Arcángel

La peor entrada de la temporada, con menos de 7.000 aficionados, podía hacer pensar que El Arcángel parecería un cementerio más que un estadio. Pero ya desde el inicio se comprobó que no iba a ser así. Por primera vez no se cantó el himno, a pesar de que algunos no hicieron caso a los silbidos y sí que lograron terminarlo, pero también se hizo patente que muchos querían mostrar el malestar por el descenso. El primer blanco de las iras fue Jesús León, al que ya le cantan en contra 15 meses después de llegar a El Arcángel. Los jugadores tampoco se libraron.