El pasado domingo acabaron las probaturas del Córdoba de Luis Miguel Carrión. Más de un mes de preparación veraniega para trabajar en la idea capital, el esquema y el acomodo a los diez fichajes y varios canteranos que forman ya parte del primer equipo.

Con la ventaja que supone contar con casi todos los refuerzos antes del primero de los amistosos, Carrión ha podido diseñar un equipo a su gusto y trabajar con tiempo de sobra. El resultado, al menos en cuanto a marcadores, no ha podido ser mejor. Aunque el barcelonés lo consideró «anecdótico», la realidad es que el Córdoba es el único club de Primera y Segunda División que cuenta todos sus amistosos por victorias.

RIVALES DE MENOR CATEGORÍA

Este dato es matizable, ya que el grueso de los rivales veraniegos fueron equipos de Segunda División B (Écija Balompié, Marbella, Extremadura y Mérida). Hubo incluso dos rivales de Tercera (Linares y Sanluqueño) y un conjunto difícil de catalogar, el combinado de jugadores keniatas. Sin embargo, ante los rivales de más enjundia (Almería y Betis) se dio la cara y se consiguió también la victoria. El balance en cuanto a las cifras no deja lugar a dudas del rendimiento ofrecido por el Córdoba en verano: 22 goles a favor, solo tres en contra y pleno de victorias (ocho de ocho).

En determinados partidos el equipo perdió el pulso del encuentro y se sintió incómodo en el campo

Los fríos datos no pueden esconder que en determinados momentos de algunos partidos la sensación que transmitió el equipo no fue buena, o al menos no consiguió poner en práctica los planteamientos que con tanta insistencia el entrenador barcelonés trata de hacerles asimilar.

SALIR TOCANDO DESDE ATRÁS

Sin ir más lejos, en los dos últimos duelos ante Extremadura y Mérida el Córdoba se vio sorprendido por las frenéticas salidas de los rivales y sufrió cuando no tuvo el balón. Carrión busca que sus hombres manejen el esférico y tengan la posesión, pero cuenta con algunos detalles en contra que deberá tratar de cambiar. En primer lugar, ninguno de los tres centrales de la primera plantilla ha destacado este verano por tener una buena capacidad para sacar el balón jugado.

La consecuencia de ello es que cuando el rival realiza una presión alta los mediocentros tienen que abandonar la zona ancha y acercarse al área cordobesista. Ello llevó a los atacantes a atrasar también su posición y con ello todo el planteamiento de Carrión temblaba. La suerte es que los rivales, al ser de menor categoría, perdían el gas y una vez físicamente desgastados la superioridad técnica blanquiverde bastó para vencer los encuentros. Pero para la temporada que empieza el próximo sábado habrá enfrente equipos con mucho más nivel físico y táctico que conocerán la idea de juego de Carrión y tratarán de ahogar la salida combinativa desde atrás.

Como aspecto positivo, eso sí, hay que remarcar la gran capacidad goleadora demostrada por el equipo. Una media de 2,75 goles con aportaciones importantes de segunda línea como las de Markovic (3), Alfaro (3) o Javi Galán (2). Los tres dejaron muy buenas sensaciones y serán importantes en el esquema de Carrión, que reconoció tres el último partido de la pretemporada no tener claro aún el once que sacará ante el Cádiz.