El Málaga, el rival del Córdoba esta tarde, es uno de los grandes equipos de Segunda División. Con un presupuesto muy importante para la categoría y una plantilla diseñada para meterse en ascenso directo, el pilar sobre el que basa su solvencia cada semana es su defensa. Los malaguistas solo han encajado 18 goles en 27 partidos, y las cifras fuera de casa también son positivas. En las 13 jornadas jugadas fuera de La Rosaleda, el equipo entrenado por Juan Ramón López Muñiz solo ha recibido 11 tantos por los 12 convertidos.
Los blanquiazules acumulan siete encuentros consecutivos sin conocer la derrota, pero en los últimos cinco solo consiguieron marcar en dos de ellos, y un tanto en cada uno. Si La Rosaleda fue un fortín en la primera vuelta, donde prácticamente contaban sumaban la victoria en cada partido, en la segunda vuelta han parado el ritmo, con tres empates en cuatro partidos en casa, mientras que a domicilio igualaron a cero en Tenerife y vencieron por 0-1, en su última salida, en el campo del Rayo Majadahonda.
El equilibrio en el balance ofensivo-defensivo permite a los malaguistas seguir entre los seis primeros, pero fuera de la zona de ascenso directo. Por ello, el duelo de esta tarde en El Arcángel es fundamental para el Málaga, ya que una victoria le permitiría optar a acabar la jornada entre los dos primeros de la tabla.
N’Diaye, el eje del Málaga
El centrocampista franco-senegalés N’Diaye es el puntal defensivo del Málaga. Situado por delante de la defensa, permite que Adrián González y Keiri Bare jueguen con libertad en el centro del campo. Su enorme despliegue físico le permite actuar de coche escoba, barriendo todo balón dividido y juntándose con los centrales cuando el equipo aprieta. Sin embargo, N’Diaye sufre cuando debe salir jugando desde atrás. Siempre prefiere avanzar en solitario, aprovechando su corpulencia, que optar por un pase en corto que no es su mayor virtud.
La baja de Pacheco en banda izquierda puede llevar a López Muñiz a colocar a Renato Santos o a Iván Alejo en banda izquierda, y a Adrián González en la mediapunta. No obstante, secar la pólvora que lleva varias semanas mojadas es la prioridad del Málaga. Su delantero de referencia, el argentino Blanco Leschuk, no marca desde el 29 de octubre del pasado 2018, cuando logró un doblete ante el Numancia. El ariete ucraniano Seleznov es la otra alternativa que disponen los blanquiazules para perforar la portería de Carlos Abad esta tarde.
Al menos mil malaguistas
Además, la afición blanquiazul agotó las 865 entradas disponibles para la zona visitante, y se espera que acudan a El Arcángel al menos 1.000 hinchas del conjunto malaguista.
