El cuartito de hora famoso no es en este caso el del entremés de los Álvarez Quintero, sino los últimos 15 minutos de cada encuentro en los que el Córdoba ha tirado no pocas opciones de permanencia en Segunda División. Tantas, que los blanquiverdes han dejado ir nada menos que 13 puntos en esa última fase de encuentro, por lo que si se contabilizasen tan sólo los encuentros hasta el minuto 75 el Córdoba sumaría en la actualidad 32 puntos y de tener una desventaja de 13 (más el golaverage) con la zona fatídica, pasaría a estar igualado con el Nástic, que le tiene ganado el golaverage.

«No sabemos jugar ese otro fútbol de cerrar los partidos, juntarnos y jugar de otra manera y lo pagamos otra vez caro». Son palabras de Alejandro Alfaro nada más terminar el encuentro del pasado domingo, cuando en el minuto 80 el Córdoba ganaba 1-0 y en el 93 perdía 1-2. No tiene mucho que ver, aparentemente, con el planteamiento de un entrenador ya que después de cuatro inquilinos en el banquillo y multitud de variantes, la pérdida de puntos en el último cuarto de hora ha sido una constante. La última, precisamente, el pasado domingo. Por lo tanto, uno de los aspectos que deberá apuntalar José Ramón Sandoval se centra en esa última fase del encuentro, en donde el equipo no llega, precisamente, en buenas condiciones físicas, y al que le cuesta gestionar, no ya un empate momentáneo, sino tan siquiera un triunfo a nueve minutos del final. Y no es la primera vez que le ocurre al Córdoba de esta temporada.

Los blanquiverdes han encajado la friolera de 16 goles en los últimos 15 minutos de los encuentros, prácticamente el 33% de los goles encajados. El colista de la categoría, por ejemplo, ha recibido cuatro goles menos en ese mismo periodo. El Alcorcón ha recibido 11, mientras que el Lorca ha encajado 10. En el lado opuesto, equipos que sí que cierran los encuentros en ese último periodo, entre ellos los que se podían esperar, situados arriba de la tabla. Pero también hay otros que están en la pelea en la que le gustaría estar al Córdoba. Así, el Numancia sólo ha recibido tres goles en el último cuarto de hora, al igual que el Tenerife; el Oviedo ha encajado cuatro, mientras que el Almería ha abierto su portería en cuatro ocasiones también. El Huesca, el Sporting y el Reus han recibido cinco goles cada uno en los últimos 15 minutos de los encuentros, mientras que el Osasuna ha encajado 6, muy cercano a la media de la categoría. Los otros 21 equipos de la Liga han recibido 6,6 goles en los últimos 15 minutos, por lo que el conjunto blanquiverde ha encajado casi el triple que la media de Segunda. 13 puntos que suponen la primera frontera, de muchas, que debe conquistar este Córdoba si quiere seguir aspirando a mantenerse en Segunda División una temporada más.