No bajan las aguas tranquilas por el Ebro y el Córdoba va a visitar a un Zaragoza que anda envuelto en tensión. Primero, por el episodio protagonizado esta semana por Jorge Pombo, en el que el canterano criticaba a algunos compañeros ante una multitud de aficionados. El capitán maño, Alberto Zapater, ha sido el único que ha salido a la palestra para disculpar a su paisano y comentar que pidió perdón a sus compañeros.

El cambio de entrenador tampoco ha surtido efecto hasta ahora. Lucas Alcaraz, experto en situaciones difíciles, fue llamado por el director deportivo zaragocista, Lalo Arantegui, para intentar reflotar la nave maña, que con Idiákez sumó 11 puntos en diez jornadas y situó al equipo a dos puntos del descenso. La llegada del extécnico blanquiverde aún no ha conseguido hacer reaccionar a la plantilla. En los seis encuentros que ha dirigido Lucas Alcaraz al Zaragoza ha sumado un triunfo, un empate y cinco derrotas, con cuatro goles a favor y diez en contra. Los problemas defensivos de los maños han sido evidentes y ayer se anunció la llegada del central Alberto Guitián, procedente del Valladolid, para suplir la baja de Grippo. Además, Alcaraz valora cambiar el sistema y regresar al 1-4-4-2 en rombo para abandonar el último implantado ante la visita del Cádiz, saldada con derrota (0-1) y ante el que dibujó un 1-5-3-2. Los maños andan en la misma vorágine que los cordobesistas, con cambios de nombres, aunque menos por parte de Curro Torres, lastrado por las bajas. Podría debutar el mencionado Guitián, también se especula con el regreso de Verdasca, pero en cualquier caso, el Córdoba tendrá que estar atento a hombres de calidad, como el propio Pombo, Biel o Marc Gual, entre otros.

Lo que sí parece, según el relato oficial, es que Lucas Alcaraz no se juega el puesto el próximo domingo ante el Córdoba. Desde el club maño se lanza el mensaje de que, aún con derrota ante un equipo como el Córdoba, que solo estuvo fuera de los puestos de descenso en la primera jornada, el extécnico blanquiverde continuará dirigiendo el banquillo zaragocista.

Además del mencionado Grippo, el granadino tiene en la enfermería a Papu y a Toquero, que parece que anunciará durante esta temporada su retirada de los terrenos de juego.

«El vestuario siempre ha sido el mismo y la mayoría de los jugadores ya estaban la temporada pasada. Es lógico que cuando los resultados no acompañan se generen este tipo de situaciones externas a lo que es el fútbol porque tenemos la tendencia de buscar culpables y excusas pero no es el caso la falta de unión», declaró ayer el portero zaragocista, Cristian Álvarez, que sobre el duelo ante el Córdoba afirmó que «tenemos el partido metido en la cabeza, estamos mentalizados para ganar porque lo necesitamos pero debemos darle la perspectiva de que todavía queda muchísimo y va a haber que batallar mucho, con la conciencia de que tenemos que ir fin de semana tras fin de semana y minuto a minuto en el partido, con sabiduría y fe en que vamos a ganar». Y hacerlo con Lucas Alcaraz.