La junta extraordinaria de accionistas celebrada ayer en El Arcángel dio para pocas sorpresas, aunque sí para cambios significativos en lo social y también para conocer detalles, alguno de ellos de suma importancia.

Jesús León atendió a los medios en la previa a la junta y destacó, principalmente, la importancia vital que tiene el encuentro de mañana y la tranquilidad que le supone toda la polvareda levantada por las declaraciones de Tebas. Podría decirse que el presidente mostró la misma tranquilidad que se transmitió desde el club con el comunicado emitido en su momento. Luego, una vez en el salón de actos de El Arcángel, el presidente desveló que, a su llegada, el déficit para esta temporada se situaba ya en los dos millones de euros, aunque León aseguró que «se equilibrará con otras partidas». Fue la junta del regreso de los minoritarios, que a partir de ahora podrán acceder con 30.000 títulos como mínimo (y no 104.700 en los que marcó en su día Azaveco-Carlos González), de la dimisión de Joaquín Zulategui como consejero, aunque no como secretario del órgano de gobierno y del «no» de los pequeños accionistas a la modificación de los estatutos para adaptarlos al acuerdo de compraventa del club entre Aglomerados Córdoba y Azaveco.

LÍMITE SALARIAL DEPORTIVO / CADA PUNTO, «UN MUNDO»

Uno de los primeros detalles que explicó León en la junta fue el exceso sobre el límite salarial deportivo de 1,3 millones de euros heredado de la anterior propiedad. «LaLiga calcula la venta media de jugadores de los últimos tres años y la del Córdoba era de 1,7 millones». León, en cualquier caso, no detalló que ese margen siempre es opcional de incluir por parte de cada club. En el caso del Córdoba se hizo. «Si no cumples con esa media, es decir, vender por valor de esos 1,7 millones, esa cantidad queda en negativo. Aunque rebajan un 20% y otra pequeña cantidad, de ahí que quedara finalmente en 1,3 millones». La forma de resolverlo, al menos temporalmente, también la detalló León. «Nos dejaban fichar por la mitad de lo que lográramos dar salida más una cantidad en metálico que yo, personalmente, transferí de mis cuentas a LaLiga». Quizá por esta explicación y otras que dio, el presidente empezó su alocución explicando que «cada punto que tocamos desde nuestra llegada ha sido un mundo, una barrera y la primera de ellas fue, precisamente, el mercado invernal de fichajes».

DIMISIÓN DE UN CONSEJERO / ¿UN GUIÑO?

Con apenas tres meses en el cargo Joaquín Zulategui presentó su dimisión «por motivos personales», explicó León en la junta. Zulategui desempeñará ahora un cargo en el club que se implantará en todos progresivamente según los designios marcados por LaLiga. El navarro continuará como secretario del consejo de administración, pero a más de uno le rondó lo ocurrido en los últimos días con Javier Tebas. Alguna teoría señala que el presidente de LaLiga tiene el concepto del Córdoba como el de un club más y que el relevo en la figura de León le pareció, incluso, acertado a sus ojos. Pero no tanto la presencia de Luis Oliver, y la cercanía de Zulategui con éste es conocida. De hecho son socios. De ahí que más de uno, ayer, mantuviera la teoría del guiño a Tebas. León ya demostró, desde el proceso de compraventa, su versatilidad.

BÚSQUEDA DE INGRESOS / ANTE EL CSD

«Cuando llegamos, el presupuesto era negativo en dos millones de euros y los hemos equilibrado con dotaciones que hay que cumplir. Debe haber equilibrio económico». Así de claro lo afirmó León en la junta de accionistas. Ese equilibrio se planteó la pasada semana, cuando compareció ante el CSD para hablar del presupuesto de la actual temporada, tal y como adelantó este periódico. El Córdoba necesita ingresos extra para equilibrar un presupuesto, heredado de la anterior propiedad, que se desvía en números rojos en una cantidad en torno al 20% del presupuesto total. Es llamativa dicho desvío, porque en el último trimestre del año pasado fue notorio cómo se agudizó la ausencia de inversión en infraestructuras y gastos corrientes.

NORMALIZACIÓN / LA JUNTA DE LOS MINORITARIOS

Se conocerá a la de ayer como la junta del regreso de los accionistas minoritarios, uno de los objetivos de León desde su llegada. Se modificaron los estatutos para que los requisitos de posesión de títulos bajasen de los más de 104.000 a los 30.000, así como la sindicación. También se votó el cambio de los estatutos para traspasar a Azaveco «los derechos políticos y económicos de las acciones» en favor de la anterior prpietaria «en caso de incumplimiento de los compromisos económicos del contrato». Es decir, que en caso de que Aglomerados no abonase los plazos de pago las acciones regresarían a poder de Azaveco, lo que supondría el regreso de Carlos González. Y los minoritarios, que no olvidan, votaron en contra, aunque se impuso el 98,71% del accionista mayoritario, que dejó claro que «voy a cumplirlo» con una gran sonrisa. Comandados por Antonio Garcés y José María Córdoba, el sindicato de minoritarios volvió a preguntar por el supuesto derecho de crédito del Córdoba sobre Ecco Documática, del que solicitaron información, y León adjuntó la petición al acta de la junta para poder dar información sobre el asunto en un futuro.

Y uno de los puntos -no del día- más llamativos del acto es que éste finalizó entre aplausos, casi una ovación que daba la bienvenida a la normalidad institucional. De hecho, se echó de menos el apartado de ruegos y preguntas, que sólo recogió una interrogante sobre la ciudad deportiva. La falta de costumbre. León respondió con su mantra: «Estamos centrados en lo deportivo», emplazando el asunto para más adelante. Ahora, sólo toca pensar en la final de mañana.